Actualidad
Redacción Crónica Ferroviaria - Fotos: Segundo Giménez
Lamentablemente, siempre los ramales CC o C de la Línea Belgrano (en la zona tucumana) es noticia todas las semanas, si no es por el descarrilamiento de algún tren de carga es, como en este caso, por las inundaciones debido a las grandes lluvias desatadas en la provincia durante estos últimos días.
Debido al aluvión de agua, barro y piedras que arrastra en conjunto los ríos Medina (Km. 1186) y Gastoná (Km. 1296), la alcantarilla que se encuentra en el Km. 1193 (entre las estaciones Monteagudo y Atahona del Ramal CC) se vió sobrepasada por el torrente, lo que hizo que inmediatamente el tráfico ferroviario sea suspendido, concurriendo al lugar gente de vía y obra de bases Lamadrid y San Pedro de Guasayán para observar el estado de la misma. (ver fotos).
Por otro lado, en el terraplen ferroviario sobre el arroyo La Esperanza ubicado en cercanías de Tafí Viejo (Barrio Calpini) en el Km. 813,575, que a la vez es el paso peatonal de Sur a Norte y viceversa de los habitantes del humilde barrio, dividido por el arroyo que con el paso de los años adquirió la morfología de un cañadón, sumado a la inestable composición del suelo, permeable al extremo, sin duda se ve ahora agravado por el efecto "sifón" de las aguas que se escurren por bajo del puente ferroviario que fue reconstruido hace un año, a pesar de las pantallas de escurrimiento la masa hídrica orada las barracas del humilde barrio que debería ser mudado a otro emplazamiento cuanto antes.
Según expertos del lugar, todo esto ocurre por la tala descontrolada y la proliferación de "countries" sin estudio de impacto ambiental, fincas cítricas que han mutado en barrio cerrados, cuenca sin sistematización y una obra cívil parcial en su parte media, hace del cauce un "gran presurizador" que aguas abajo se descontrola potenciado por la colmatación (*) de sedimentos y toneladas de residuos sólidos urbanos en su cauce.
En ese lugar hay que realizar urgentemente obras hídricas, porque de lo contrario, y debido al cambio climático que desde hace unos años viene azotando esa zona con grandes lluvias, noticias como estas serán moneda corriente como los descarrilamientos de trenes.
El descarrilamiento semanal
Como no podía ser de otra forma, lamentablemente tenemos que informar que en el día de ayer aproximadamente las 18:30 horas por efecto de las fuertes lluvias el tren de carga Nro. 5005 con destino a Salta, descarrilaron dos vagones saltando de las vías en cercanías de la estación Choromoro del ramal C de la Línea Belgrano.
Gracias al accionar del personal.UP Tucumán de la empresa Trenes Argentinos Cargas Línea Belgrano, el resto de la formación pudo seguir camino al Norte quedando los dos vagones cubiertos (vacíos) siniestrados. Trabaja en el lugar del accidente personal de Vía y Obra.
(*) Relleno de una cuenca sedimentaria con materiales detríticos arrastrados y depositados por el agua.
Redacción Crónica Ferroviaria - Fotos: Segundo Giménez
Lamentablemente, siempre los ramales CC o C de la Línea Belgrano (en la zona tucumana) es noticia todas las semanas, si no es por el descarrilamiento de algún tren de carga es, como en este caso, por las inundaciones debido a las grandes lluvias desatadas en la provincia durante estos últimos días.
Debido al aluvión de agua, barro y piedras que arrastra en conjunto los ríos Medina (Km. 1186) y Gastoná (Km. 1296), la alcantarilla que se encuentra en el Km. 1193 (entre las estaciones Monteagudo y Atahona del Ramal CC) se vió sobrepasada por el torrente, lo que hizo que inmediatamente el tráfico ferroviario sea suspendido, concurriendo al lugar gente de vía y obra de bases Lamadrid y San Pedro de Guasayán para observar el estado de la misma. (ver fotos).
Por otro lado, en el terraplen ferroviario sobre el arroyo La Esperanza ubicado en cercanías de Tafí Viejo (Barrio Calpini) en el Km. 813,575, que a la vez es el paso peatonal de Sur a Norte y viceversa de los habitantes del humilde barrio, dividido por el arroyo que con el paso de los años adquirió la morfología de un cañadón, sumado a la inestable composición del suelo, permeable al extremo, sin duda se ve ahora agravado por el efecto "sifón" de las aguas que se escurren por bajo del puente ferroviario que fue reconstruido hace un año, a pesar de las pantallas de escurrimiento la masa hídrica orada las barracas del humilde barrio que debería ser mudado a otro emplazamiento cuanto antes.
Según expertos del lugar, todo esto ocurre por la tala descontrolada y la proliferación de "countries" sin estudio de impacto ambiental, fincas cítricas que han mutado en barrio cerrados, cuenca sin sistematización y una obra cívil parcial en su parte media, hace del cauce un "gran presurizador" que aguas abajo se descontrola potenciado por la colmatación (*) de sedimentos y toneladas de residuos sólidos urbanos en su cauce.
En ese lugar hay que realizar urgentemente obras hídricas, porque de lo contrario, y debido al cambio climático que desde hace unos años viene azotando esa zona con grandes lluvias, noticias como estas serán moneda corriente como los descarrilamientos de trenes.
El descarrilamiento semanal
Como no podía ser de otra forma, lamentablemente tenemos que informar que en el día de ayer aproximadamente las 18:30 horas por efecto de las fuertes lluvias el tren de carga Nro. 5005 con destino a Salta, descarrilaron dos vagones saltando de las vías en cercanías de la estación Choromoro del ramal C de la Línea Belgrano.
Gracias al accionar del personal.UP Tucumán de la empresa Trenes Argentinos Cargas Línea Belgrano, el resto de la formación pudo seguir camino al Norte quedando los dos vagones cubiertos (vacíos) siniestrados. Trabaja en el lugar del accidente personal de Vía y Obra.
(*) Relleno de una cuenca sedimentaria con materiales detríticos arrastrados y depositados por el agua.