Cartas de Lectores
Señor Director de Crónica Ferroviaria:
Escribo estas líneas absorto luego de enterarme por distintos medios
periodísticos, que los hermanos Cirigliano han vendido la empresa EMFER S.A. a
un grupo chino.
Realmente parece un cuento chino, que estos personajes nefastos que
están procesados penalmente por la masacre que costó 52 vidas en la estación
Once de Septiembre, sean noticia por la venta de una empresa que jamás deberían
haber tenido.
País, no, mejor dicho, gobiernos generosos que les regaló dicha empresa,
más las Líneas Mitre y Sarmiento a esta gente sabían de colectivos, ya que
Cirgliano padre comenzó a ganarse la vida como colectivero, si no estoy mal
informado, en la ciudad de Necochea; pero de trenes sabían poco y nada, y de
yapa, vieron y plasmaron un negocio formidable mutando los coches eléctricos
Toshiba en los engendros a los que llamaron Puma.
Es más, voy a hacer una pequeña reseña de lo que hicieron los Cirigliano
cuando tomaron posesión de los trenes:
1) Sacaron de circulación a los nobles coches eléctricos Metropolitan
Vickers ingleses (los originales marrones y los restaurados por el gobierno de
Alfonsín en Chascomús de color blancos, otro negocio de pura cosmética). Todos
estos juegos de trenes que desafectaron, jamas fueron reemplazados;
consecuencia, menos coches para la línea Mitre. Qué hicieron: trajeron coches
del Sarmiento, por consecuencia menos trenes en ambas líneas.
Hasta entonces no existía en el Mitre ninguna formación con menos de
seis coches, ya sean Toshiba o Vickers. El Sarmiento siempre formó con 8 ó 9
vehículos.
2) Cambiaron todos los juegos de bocinas a los Toshiba.
3) Comenzaron con el maquillaje, pintaron las formaciones de color bordó
y le sacaron los asientos rebatibles y las persianas sin necesidad alguna,
obsérvese que la Línea Urquiza mantiene dichos asientos y persianas con un
funcionamiento correcto. Recuerdo que a la primera formación maquillada fue
presentada como la gran noticia en el andén Nro. 3 de estación Retiro con la
visita del entonces Ministro de Economía (El Gran Ferrocida), Domingo F.
Cavallo, como si hubieran fabricado un tren de alta velocidad.
4) La codicia iba en aumento y los Entes de Control y el gobierno daban
rienda suelta, entonces inventaron los Pumas, pintura nueva blanca y celeste,
aire acondicionado, nuevas cabinas de mando, etc, etc... Total EMFER facturaba
y el Estado pagaba. Ah!, me olvidaba, no sólo cada vez menos coches tenían las
formaciones, también decidieron sacar por completo los asientos a un coche por
tren con la excusa de tener furgón más los dos que ya había en los extremos de
cada formación. Total los pasajeros se bancan lo que venga.
5) Al computarizar los Pumas, cada tres por cuatro, la computadora
falla, ergo tren vacío a galpón.
6) Eliminaron a los dos guardas que históricamente recorrían los trenes
solicitando boletos, y por supuesto, también dejo de existir el Inspector;
dejaron uno sólo para el abrir y cerrar las puertas. Pusieron molinetes en las
estaciones y anularon un porcentaje altísimo de ingreso y egreso de las mismas;
consecuencia, los pasajeros se apiñan para salir de las estaciones y muchos de
ellos tienen que caminar varias cuadras de más por esta medida.
7) Desaparecieron balanzas/ bascúlas, relojes, campanas, carros de
encomienda, cajas fuertes, etc... Se los podía encontrar en anticuarios, (esto
no sólo lo hicieron los Cirigliano), en las otras líneas privatizadas ocurrió
lo mismo.
Podría seguir enumerando un sin fin de hechos pero se haría muy extensa
mi carta.
A todo lo dicho, le agrego que los hermanos son dueños de varias líneas
de colectivos urbanos, de media y de larga distancia.
Que utilizan para estas líneas predios ferroviarios en Retiro como
terminal de sus ómnibus y tienen una oficina de la empresa Plaza en la estación
Barrancas de Belgrano, seguramente deben hacer usos de otros que yo desconozco.
Poseen una empresa de taxis aéreos con avión ó aviones propios, obvio a
nombre de sociedades en donde ellos no figuran como titulares. Empresa de
transporte de ómnibus en el sur de Estados Unidos.
No entiendo como el Ministerio de Interior y Transporte de la Nación y
la Secretaría de Transporte de la Nación no les retira los permisos para operar
con las pruebas que ya tienen en su contra, por mas que aún la Justicia no los
haya condenado aún.
Como el Gobierno actual no les Expropió EMFER y como les permite
graciosamente venderla. Saluda cordialmente
Javier
Eduardo Ripoll
Usuario
frecuente del transporte público