Exterior
Luis Zubizarreta, Javier Giménez, Carlos Gill y Michel Chaim participaron de un webinar que analizó la situación, desafíos y potencialidades de la Hidrovía Paraguay-Paraná.
Empresarios y expertos de cuatro países coincidieron en la necesidad de mejorar la competitividad y eficiencia, con enfoque de corresponsabilidad público- privado, de la hidrovía Paraguay-Paraná porque es fundamental para el comercio y el desarrollo económico de Bolivia y Paraguay, sobre todo, porque son países sin acceso al mar, pero también para el suroeste de Brasil y el centro industrial de Argentina.
Esa es la conclusión a la que arribaron entendidos en la materia en un evento virtual organizado por los periódicos La Razón de Bolivia y Clarín de Argentina.
“La Hidrovía tiene un rol clave en la logística de los países que la usan, mueve 100 millones de toneladas cada año y esto representa el 85% de la carga argentina, el 90% de la paraguaya y el 50% de la carga boliviana”, explicó Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara de Puertos Privados de Argentina.
Según los datos, cada año transitan 4.500 buques y se transportan unas 330 mil personas, por lo que mejorar –dijo- su competitividad es clave para llegar a mercados de ultramar, más aún porque la carga que se mueve es de bajo valor.
Mientras que para Carlos Gill, presidente de Ferroviaria Oriental y de Puerto Continental (Quijarro, Bolivia), el “río es el futuro” y en esa lógica requiere de una corresponsabilidad público-privado para su aprovechamiento en beneficio de los países que comparten este canal hacia el Atlántico.
“El Estado debe promover políticas de desarrollo portuario con medidas y acciones factibles para el aprovechamiento operativo del transporte acuático de las zonas francas y puertos cedidos a través de convenios internacionales, con énfasis en puertos y vías internacionales, para facilitar el desarrollo del comercio exterior”, planteó en el encuentro, según un boletín institucional.
Para afrontar la ‘pandemia de la Hidrovía’ Paraguay-Paraná, proponen una Cámara Privada Fluvial
Gill propuso formar el Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná para encarar desde el sector público políticas y planes orientados a hacer navegable el río la mayor parte del año, una agilización de trámites aduaneros, la generación de incentivos tributarios para la logística de exportaciones y la generación de incentivos para la responsabilidad y sostenibilidad ambiental.
En cuanto al rol del sector privado, este –señaló- recae en tres grandes áreas: el rol de las empresas de transporte, el rol de los puertos y el rol de las navieras. Estos tres roles se aglutinan en el cliente. Las empresas de transportes deben maximizar las velocidades de descarga, mediante coordinación integrada con las empresas portuarias para mejorar la competitividad de la logística.
Javier Giménez, vicepresidente de GICAL S.A. Almacenes Generales de Depósito y Director de Sarcom S.A., el operador de los puertos graneleros más grande del Paraguay, coincidió con Zubizarreta en el hecho de que la hidrovía es esencial para las exportaciones paraguayas.
“Estamos proyectando para el futuro un movimiento de 50 millones de toneladas por la hidrovía (…) el arroz se está posicionando como el futuro gran commodity del país y en ese contexto esperamos que Brasil le dé más importancia a la Hidrovía, que se vuelque completamente a ella, como debería ser”, señaló.
También coincidió con Gill en la importancia de garantizar la navegabilidad del río. “El río es lo más importante, hay que centrarse en él. El río no es nuestro, es de las generaciones futuras y hay que tratarlo como se merece”, agregó.
Para Michel Chaim, presidente de Bionave Navegação S.A. y socio controlador de Puerto Cáceres (Brasil), en su país no ven el valor estratégico de esta ruta naviera para el comercio y desarrollo económico, aunque también reparó en los problemas naturales y burocracia que la afecta.
“Estamos pagando caro por eso, también hay un exceso de burocracia en las adunas brasileras y bolivianas y eso cuesta”, sostuvo y planteó potenciar el flujo fluvial de las cargas generadas por los polos de Bolivia, Corumbá y Murtinho, atendiendo soluciones de corto plazo para inequidades graves; desarrollar polos inexplorados de generación de cargas en la región ce Cáceres (Brasil) y de otras, potencialmente identificadas, y desarrollar nuevas tecnologías y modalidades de navegación para garantizar una logística fluvial eficiente.
Zubizarreta consideró que mejorar la competitividad permitirá bajar los fletes y aumentar la integración de los países, sus inversiones y su producción.
“Sin eficiencia económica, el desarrollo no es viable”, sentenció trayendo a colación cómo Paraguay, desde 1985, dejó de usar la logística carretera (hacia Brasil) para mover sus exportaciones hacia puertos del Atlántico y comenzó a usar la logística fluvial, lo cual permitió multiplicar por 10 sus exportaciones.
“Es vital que las empresas de transporte, los puertos y las navieras se unan estratégicamente para el beneficio final de nuestros clientes, porque todos tenemos que hacernos responsables de la Hidrovía, cada uno en el papel que le toca, pero interactuando como un engranaje de circuito logístico que involucre a los actores públicos y privados, todo ello enfocado en agilizar el comercio exterior, incrementando la capacidad y reduciendo los costos”, expuso Gill.
Su planteamiento nace motivado por las adversidades que la pandemia puso en frente del sector del transporte en general y del transporte naviero en particular. “Ya estamos en septiembre del 2021 y la ‘pandemia de la Hidrovía’, como la he bautizado, no nos puede contagiar, debemos reunirnos para aglutinar esfuerzos y aplicar las soluciones prácticas con responsabilidad ambiental de la gestión hídrica sostenible”, desafió.
Gill consideró que mejorar la competitividad permitirá bajar los fletes y aumentar la integración de los países, sus inversiones y su producción.
“Sin eficiencia económica, el desarrollo no es viable”, sentenció trayendo a colación cómo Paraguay, desde 1985, dejó de usar la logística carretera (hacia Brasil) para mover sus exportaciones hacia puertos del Atlántico y comenzó a usar la logística fluvial, lo cual permitió multiplicar por 10 sus exportaciones.
Planteó conformar una Cámara Privada Portuaria que aglutine a Puertos de los países que hacen uso de la Hidrovía, con la función de ver los aspectos inherentes a la navegabilidad, lo cual implica inversiones y acciones enfocadas en agilizar las rotaciones y eficiencias portuarias.
En cuanto al rol de las navieras, propuso formar una Cámara Privada Fluvial que aglutine a empresas fluviales y navieras de todos los países que hacen uso de la Hidrovía. Esto significa promover el desarrollo de inversiones y acciones enfocadas en agilizar la carga y descarga de barcazas y buques, en coordinación integral con los puertos en la Hidrovía.LaRazón.com