EXTERIOR
Solicitan información sobre los planes que el Gobierno de Rajoy ha
enviado a Bruselas
El proyecto de privatización de Renfe ha despertado el interés inmediato
de los grandes ferrocarriles europeos, sobre todo de los que mantienen desde
hace años presencia en España o de aquellos que por interés geoestratégico
tienen un interés natural por lo que sucede en el sector ferroviario español. La Renfe alemana, Deutsche
Bahn, la compañía estatal francesa, SNCF y ferrocarriles de los países nórdicos
observan con atención los movimientos que planea el Gobierno español, que ya
remitido a Bruselas el esquema básico de privatización, y analizan los próximos
pasos a dar. DB es un grupo en expansión que conoce muy bien el mercado español
y el funcionamiento de la propia Renfe y su equipo directivo. Desde hace años
es uno de los grandes accionistas de Transfesa empresa privada española que
controla el transporte ferroviario internacional de mercancías, un negocio que requiere disponer de vagones capaces de
circular por vías de ancho europeo y vías de ancho español. Transfesa tiene un
gran parque de material rodante con estas características y lleva más de 50
años operando en este negocio.
DB tomó el control accionarial de Transfesa en 2007, hasta alcanzar el
60% del capital, y ha mostrado siempre interés por elevar aun
más su participación. Pero el resto de socios, la propia Renfe y la SNCF , no han accedido de
momento a reducir su parte en la empresa, que consideran estratégica.
Una de las actividades claves de DB en España es el control del negocio
del transporte de coches nuevos por tren en el que nuestro país es una primera
potencia, tanto por el elevado número de fabricantes de automóviles que están
radicados en España, como por la cantidad de vehículos extranjeros que se
venden en el mercado español.
El líder nacional de esta actividad es la firma Semat, con un capital
repartido entre Transfesa, con un 62%, y Renfe, que controla en 38% restante.
Para desarrollar estas actividades la participada tiene un parque propio de más
de 1.000 vagones y varios centros
logísticos en toda España con una superficie total superior a 900.000 metros cuadrados .
Fracaso y perspectivas del mercado de mercancías
La privatización del mercado interior de mercancías en España ha sido un
fracaso. Han entrado varios operadores privados pero la cuota de mercado del
ferrocarril respecto al conjunto de modos de transporte no ha subido y sigue
siendo marginal. La de Renfe sigue siendo
importante dentro de esa cuota del sector y el potencial que se abre, con la
entrada en servicio de nuevas líneas AVE que liberan el uso de las vías
convencionales para el transporte de carga, es importante.
Flanco sindical
Una alianza o la entrada directa de DB, SNCF o los ferrocarriles suecos
en alguna o varias de las cuatro empresas en que se segregará Renfe podría
encauzar el problema que ha suscitado el proyecto de privatización con los
sindicatos. En pie de guerra contra el plan, al que consideran incoherente y
una amenaza para la supervivencia de la empresa pública, las centrales han
llevado a cabo ya un par de jornadas de huelga y anuncian más. Consideran que el Ministerio de Fomento ha
actuado de forma unilateral, sin tener una idea clara de lo que quiere y sin
someter el proyecto a la opinión o negociación con los trabajadores. DB y SNCF
son grupos públicos con niveles de eficiencia en la gestión reconocidos en el
sector cuya entrada podría ser asumida mejor por los sindicatos.
El plan privatizador de Renfe , se recogen en el plan presupuestario
2013-2014 que el Ejecutivo ha enviado a la UE , en el que se desglosan las medidas orientadas
a cumplir los objetivos de déficit.
El documento enviado a Bruselas revela que el Gobierno está dispuesto a
que entre capital privado en Renfe, que se dividirá en cuatro sociedades.
En el proyecto se puede leer que la reforma de liberalización de
infraestructuras pretende "dotar a la gestión de Renfe de esquemas
empresariales similares a los de otros operadores ferroviarios del ámbito
europeo (...), sin descartar la posible entrada de capital privado en las
nuevas empresas, si se considera conveniente".
Renfe se dividirá en cuatro empresas, que gestionarán servicios de
viajeros, mercancías y logística, fabricación y mantenimiento, y venta y
arrendamiento de material ferroviario.
Además, se suprimirá la empresa que gestiona los ferrocarriles de vía
estrecha (FEVE), que pasará a integrarse en Renfe y Adif.CapitalMadrid