Se
multiplican los reclamos en la
Mesopotamia para que las autoridades se sensibilicen -por las
personas que se quedaron sin un medio de transporte económico- para que vuelva
El Gran Capitán. Isabelina Ramírez de Centurión con tristeza afirma que de no
ser restablecido el servicio “este año muchos de nosotros no tendremos fiestas,
ya estábamos acostumbrados a la llegada de nuestros familiares, hijos, nietos y
algunos amigos”.
No recuerda exactamente
si son quince o veinte sus nietos, ya tiene tres bisnietos, desde hace mas de
treinta años vive en Alvear -Corrientes- su esposo es jubilado ferroviario, se
llama Isabelina Ramírez de Centurión y con tristeza afirma “de lo que estoy
segura es de que este año muchos de nosotros no tendremos fiestas, ya estábamos
acostumbrados a la llegada de nuestros familiares, hijos, nietos y algunos
amigos. La misma estación tenía alegría, todos veníamos a recibir al tren de
pasajeros ya sea de Buenos Aires o de Posadas hoy esto es un cementerio” afirma
Isabelina que de eso sabe mucho pues trabajó en la boletería de TEA para El
Gran Capitán desde el 2003.
Isabelina es una de las tantas voces que reclaman ser escuchadas.
“Hasta que los de
Es tanta la
insensibilidad de algunas autoridades que han llagado a afirmar “Si no tienen
dinero para viajar en micro que no viajen” podrían agregar “Si no tienen para
estudiar que no estudien, si no tienen para comer que no coman” vivimos el
mundo del revés, nos quitaron el tren de pasajeros que con fuegos artificiales
inauguró Néstor Kischner, el de mas largo recorrido.
En Corrientes
durante su primer mandato lo recuperó el Gobernador Ricardo Colombi con un contrato
por treinta años con la empresa Trenes Especiales Argentinos (TEA) irónicamente
el mismo Gobernador revocó ese compromiso a los ocho años de un servicio y que
es bueno decirlo durante ese tiempo no tuvo multas ni observaciones de las
autoridades ferroviarias nacionales, ni ningún accidente luctuoso.
El Gran
Capitán con los colores celeste y blanco unió parajes, pueblos y ciudades,
trajo y llevó familias enteras que optaron por él seguros de que a pesar de las
horas de viaje llegarían vivos, lo que no puede asegurarse de hacerlo en
nuestras rutas.
Hoy el gran
actor de los reclamos por la defensa de los derechos es el ciudadano,
comprobable en las movilizaciones por tener un buen servicio ferroviario en la
mesopotamia, por que las vías tan mal mantenidas sean reparadas y por que El
Gran Capitán con sus banderas ondeando al viento traiga progreso y alegría
nuevamente. Fuente: Abelardo Rojas Maffei