Gremiales
Metrovías
afirmó que se trató de "un piquete y no un paro ni una medida de
fuerza", porque lo realizó "un grupo de no más de 30 personas que no
tienen representatividad gremial" y "buscan visibilidad en los medios
para forzar el reconocimiento sindical", al que no acceden porque "no
cumplen con los requisitos formales mínimos".
"En
vez de reclamar por los canales formales lo hacen con este accionar, que es
ilegal. No respondían al pedido de liberar la vía y por eso la empresa dio
intervención a la Fiscalía Contravencional 36", dijo a Télam un vocero de
la concesionaria.
Una
vez que la Metropolitana dejó el lugar, el personal de Metrovías empleaba una
hora en "alistar las formaciones y hacer un recorrido de prueba y
verificación de que esté todo en condiciones para prestar el servicio, que en
un día hábil transporta en la Línea C a unas 170.000 personas", de las
cuales al menos 100.000 se vieron afectadas por el corte, estimó el portavoz.
La
sorpresiva medida, que impidió a las 5 de la mañana el inicio del servicio que
une Retiro y Constitución, la realizaron
"personas
ajenas a la operación en la zona de vías", indicó Metrovías en un
comunicado, mientras que los referentes de la Asociación Gremial de
Trabajadores del Subterráneo y Premetro (AGTSyP) afirmaron no tener "nada
que ver" con la protesta.
El
secretario general de AGTSyP, Roberto Pianelli, aseguró que el sindicato que
conduce "no tiene nada que ver" con la sorpresiva medida y
responsabilizó por la situación a la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
“A
primera hora un grupo de personas que son conocidas por los trabajadores,
porque hace unos años solían venir con las patotas de la UTA que venían a
golpear a los trabajadores, bajaron a las vías” para impedir que salgan las
formaciones, señaló Pianelli en declaraciones a radio América.
En
el mismo sentido, el referente de los Metrodelegados Norberto Segovia aseguró
desconocer a quienes interrumpieron el servicio, aclaró que "esto no es un
paro" y exigió al gobierno porteño "hacerse cargo de la
situación".
Cerca
de las 11.30, a más de seis horas de iniciada la medida, Segovia consideró
"llamativo" que la Metropolitana no hubiera desalojado aún a los
manifestantes, como suele hacer en estas situaciones.
De
hecho, sólo 15 efectivos de esa fuerza policial se acercaron hasta la estación
de Constitución y se ubicaron a lo largo de los andenes, pese a que no se
registró ningún tipo de inconveniente entre los usuarios del subte.
El
vocero del STS Antonio Morales aseguró a Télam que la medida se realizó en
"en reclamo de falta de mantenimiento de las formaciones y de la
implementación de un sistema de venta de boletos y carga de tarjeta SUBE, que
implicaría una merma en la cantidad de personal".
Asimismo,
afirmó que el gremio tiene personería jurídica desde mayo de 2014 y que cuenta
con 800 afiliados.
Desde
Metrovías señalaron que las 30 personas que cortaron el servicio están
"lideradas por un ex empleado", y que "debido a esta situación
se están llevando a cabo las denuncias pertinentes ante las autoridades competentes".Telam