Actualidad
Redacción Crónica Ferroviaria
Ante las afirmaciones del Ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, en su reciente visita a la ciudad del Neuquén y con relación a que se daría prioridad al transporte de cargas ferroviario y no así al transporte de pasajeros, la Senadora Magdalena Odarda, presidenta de la “Comisión Especial de Servicios Ferroviarios de Pasajeros Estrella del Valle y Tren del Dique” del Senado de la Nación, respondió refiriéndose al histórico reclamo por la vuelta del tren que une las localidades del Alto Valle desde Chichinales hasta Senillosa.
Al Ministro de Transporte de la Nación Guillermo Dietrich
Con el objetivo que sea valorado el esfuerzo de personas y organizaciones para la recuperación del Tren del Valle tras 20 años de abandono, quiero recordarle que la legislatura de Río Negro aprobó en el año 2008, la creación de una Comisión Interpoderes e Interestadual destinada al seguimiento del Proyecto “Tren del Valle”, que uniría Chichinales en Río Negro, con Senillosa en la provincia de Neuquén. Esos objetivos se fueron ampliando, sumándose los tramos como el Plaza Constitución-Zapala (ex “Estrella del Valle” o “El Zapalero”), la construcción del nuevo ramal Choele Choel-San Antonio Oeste en distintas etapas de ejecución, con el afán de trabajar para reactivar y crear ramales rescatando la importancia del rol económico y social trascendente para la región.
Fueron casi diez años de reuniones, gestiones y reclamos con una importante participación social, en la que estuvieron activas las organizaciones “Zapala en Acción”, que trabaja en la recuperación del tren desde Zapala hasta Río Colorado, el movimiento de jóvenes “Despertemos los Durmientes”, fundación “Cabus Trenes” de Cipolletti, y gremios La Fraternidad y Unión Ferroviaria, entre otros.
En abril de 2015, el Congreso de la Nación sancionó la Ley N° 27.132, que establece la “política de reactivación de los ferrocarriles de pasajeros y de cargas, renovación y mejoramiento de la infraestructura ferroviaria, incorporación de tecnologías y servicios”.
Finalmente, en julio de 2015, se inauguró la partida de la primera formación con 210 pasajeros, desde Neuquén hacia Cipolletti. Desde entonces, la comisión del Valle y del gremio La Fraternidad comenzó a gestionar la extensión del servicio. Después de casi 20 años de abandono y los recientes logros, es inadmisible que se vuelva atrás en este propósito. Por otra parte, son más de 40 mil personas que a lo largo de la región han firmado solicitando el tren como muestra de apoyo.
El enlace rápido Cipolletti-Neuquén, demostró la eficiencia del tren como medio de transporte. Los números muestran que en la actualidad la cantidad promedio por día se duplicó con relación a los comienzos de 2016, pasando de 1.000 a 2.000 pasajeros. Si tenemos en cuenta que de Cipolletti a Neuquén se trasladan más de 4500 personas diariamente por razones laborales, y que en las horas pico el tránsito en la ruta es a paso muy lento, el tren se ha transformado en la manera más rápida y segura de transporte, alternativa a la ruta 22, que encabeza las estadísticas de accidentes a nivel nacional.
En promedio, durante el año 2016 el tren transportó poco más de 20.000 usuarios mensuales en los 20 viajes que se realizan de lunes a viernes y los 12 de los sábados. Con una futura ampliación del recorrido se esperaba convertir en el principal medio de transporte de pasajeros en toda la zona del Alto Valle.
Un muerto cada cuatro días es la dura estadística de las rutas rionegrinas. En los 270 siniestros viales ocurridos en lo que va del 2017 en Río Negro, fallecieron 50 personas y más de 353 resultaron heridas. La vuelta del tren desde Chichinales hasta Senillosa, podría salvar vidas además de ser un medio de transporte cómodo, seguro, económico y rápido.
Con gran decepción vemos que no es prioridad para el gobierno un tren que transporte pasajeros, pero si un tren de carga para beneficiar a los capitales que explotan en Vaca Muerta. Una vez más, el beneficio será para las empresas y los perjuicios serán para la gente. Por todo ello, déjeme decirle finalmente que el ferrocarril fue y es en nuestra región, parte de su historia y de su desarrollo con la llegada de los pioneros y la posibilidad de conexión con centros urbanos más grandes; y hoy es el medio económico, rápido y seguro que puede unir los pueblos.
Como una de las impulsoras de volver a la vida a los trenes, le solicito que revea la decisión. También, que se considere la obra ferroviaria entre puerto San Antonio Este y Choele Choel para el transporte de fruta a costos bajos.
El tren, como lo he manifestado siempre, debe dejar de ser un patrimonio público perdido, para transformarse en una expresión de soberanía y de nación.
Redacción Crónica Ferroviaria
Ante las afirmaciones del Ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, en su reciente visita a la ciudad del Neuquén y con relación a que se daría prioridad al transporte de cargas ferroviario y no así al transporte de pasajeros, la Senadora Magdalena Odarda, presidenta de la “Comisión Especial de Servicios Ferroviarios de Pasajeros Estrella del Valle y Tren del Dique” del Senado de la Nación, respondió refiriéndose al histórico reclamo por la vuelta del tren que une las localidades del Alto Valle desde Chichinales hasta Senillosa.
Al Ministro de Transporte de la Nación Guillermo Dietrich
Con el objetivo que sea valorado el esfuerzo de personas y organizaciones para la recuperación del Tren del Valle tras 20 años de abandono, quiero recordarle que la legislatura de Río Negro aprobó en el año 2008, la creación de una Comisión Interpoderes e Interestadual destinada al seguimiento del Proyecto “Tren del Valle”, que uniría Chichinales en Río Negro, con Senillosa en la provincia de Neuquén. Esos objetivos se fueron ampliando, sumándose los tramos como el Plaza Constitución-Zapala (ex “Estrella del Valle” o “El Zapalero”), la construcción del nuevo ramal Choele Choel-San Antonio Oeste en distintas etapas de ejecución, con el afán de trabajar para reactivar y crear ramales rescatando la importancia del rol económico y social trascendente para la región.
Fueron casi diez años de reuniones, gestiones y reclamos con una importante participación social, en la que estuvieron activas las organizaciones “Zapala en Acción”, que trabaja en la recuperación del tren desde Zapala hasta Río Colorado, el movimiento de jóvenes “Despertemos los Durmientes”, fundación “Cabus Trenes” de Cipolletti, y gremios La Fraternidad y Unión Ferroviaria, entre otros.
En abril de 2015, el Congreso de la Nación sancionó la Ley N° 27.132, que establece la “política de reactivación de los ferrocarriles de pasajeros y de cargas, renovación y mejoramiento de la infraestructura ferroviaria, incorporación de tecnologías y servicios”.
Finalmente, en julio de 2015, se inauguró la partida de la primera formación con 210 pasajeros, desde Neuquén hacia Cipolletti. Desde entonces, la comisión del Valle y del gremio La Fraternidad comenzó a gestionar la extensión del servicio. Después de casi 20 años de abandono y los recientes logros, es inadmisible que se vuelva atrás en este propósito. Por otra parte, son más de 40 mil personas que a lo largo de la región han firmado solicitando el tren como muestra de apoyo.
El enlace rápido Cipolletti-Neuquén, demostró la eficiencia del tren como medio de transporte. Los números muestran que en la actualidad la cantidad promedio por día se duplicó con relación a los comienzos de 2016, pasando de 1.000 a 2.000 pasajeros. Si tenemos en cuenta que de Cipolletti a Neuquén se trasladan más de 4500 personas diariamente por razones laborales, y que en las horas pico el tránsito en la ruta es a paso muy lento, el tren se ha transformado en la manera más rápida y segura de transporte, alternativa a la ruta 22, que encabeza las estadísticas de accidentes a nivel nacional.
En promedio, durante el año 2016 el tren transportó poco más de 20.000 usuarios mensuales en los 20 viajes que se realizan de lunes a viernes y los 12 de los sábados. Con una futura ampliación del recorrido se esperaba convertir en el principal medio de transporte de pasajeros en toda la zona del Alto Valle.
Un muerto cada cuatro días es la dura estadística de las rutas rionegrinas. En los 270 siniestros viales ocurridos en lo que va del 2017 en Río Negro, fallecieron 50 personas y más de 353 resultaron heridas. La vuelta del tren desde Chichinales hasta Senillosa, podría salvar vidas además de ser un medio de transporte cómodo, seguro, económico y rápido.
Con gran decepción vemos que no es prioridad para el gobierno un tren que transporte pasajeros, pero si un tren de carga para beneficiar a los capitales que explotan en Vaca Muerta. Una vez más, el beneficio será para las empresas y los perjuicios serán para la gente. Por todo ello, déjeme decirle finalmente que el ferrocarril fue y es en nuestra región, parte de su historia y de su desarrollo con la llegada de los pioneros y la posibilidad de conexión con centros urbanos más grandes; y hoy es el medio económico, rápido y seguro que puede unir los pueblos.
Como una de las impulsoras de volver a la vida a los trenes, le solicito que revea la decisión. También, que se considere la obra ferroviaria entre puerto San Antonio Este y Choele Choel para el transporte de fruta a costos bajos.
El tren, como lo he manifestado siempre, debe dejar de ser un patrimonio público perdido, para transformarse en una expresión de soberanía y de nación.