NOTA DE
OPINIÓN
Por: Jorge
de Mendonca (Para Crónica Ferroviaria)
(Sobre los tecnócratas que nos destruyen desde hace medio siglo).
William Thomas Larkin estaría fascinado con los resultados 52 años
después de su paso por la Argentina como "asesor presidencial" en
materia de transporte del Presidente Frondizi, quien no sólo desintegró el
sistema, sino que generó una línea de ¿pensamiento?, orientada a justificar el
abandono del territorio y la concentración de la población en villas miserias y
countries de unas muy pocas ciudades...
En el año 2006, durante una serie de charlas brindadas por especialistas
diversos en la Feria del Libro, un orador citaba el horizonte granario junto a
las cifras que brindarían los resultados a la economía del país. Otro orador,
miembro de una ONG por la vida silvestre, también demostró cómo debía cuidarse
la diversidad natural.
El segundo mostró un mapa de la Argentina que parecía un territorio con
un poco de acné: Los pequeños sitios "naturales" para resguardar la
diversidad silvestre. El otro orador había expresado para lo que servirían los
impuestos a los granos exportados al Estado: "para con ése dinero pagar
los subsidios a las personas que queden fuera del sistema económico".
Esos señores enseñan, insertan, modelan, pensamiento dentro de las
cabezas de los futuros asesores o directores de empresas, periodismo y del mismo
Estado. Esos señores, repugnantes especímenes, modelan pensamiento para que
aceptemos que las cosas sólo pueden ser así;: Unos pocos ganando mucho, y el
resto fuera del sistema. "Yaguareté que queda fuera del ghetto, no será
diversidad a cuidar".
La imagen que acompaña ésta nota muestra el 66% de los ramales y líneas
ferroviarias aniquiladas por "otros pensadores". Las mismas
constituían la capilaridad del sistema ferroviario: Hacía que el tren llegara a
muchas partes y que las troncales ferroviarias estuvieran llenas de tráfico. Cada
ramal fue cerrado por "deficitario", pero jamás se dijo que eran
parte de un SISTEMA y que ellos daban las ganancias de los que sí parecían
superavitarios.
El pasado jueves, durante una sesión de técnicos y empresarios del tema ferroviario, un economista de una empresa ferroviaria, un hacedor de opinión dentro del ESTADO, lapidariamente dijo que "sólo son rentables los trenes de commodities", y que los de otras cargas y de pasajeros no lo son. Que sólo hay que atender a los suburbanos de Buenos Aires y algún corredor de larga distancia.
El pasado jueves, durante una sesión de técnicos y empresarios del tema ferroviario, un economista de una empresa ferroviaria, un hacedor de opinión dentro del ESTADO, lapidariamente dijo que "sólo son rentables los trenes de commodities", y que los de otras cargas y de pasajeros no lo son. Que sólo hay que atender a los suburbanos de Buenos Aires y algún corredor de larga distancia.
Es seguro que el muchacho lo aprendió. Pero ninguno de los que le
enseñaron, le informaron que el Ferrocarril General Belgrano movilizaba 9
millones de toneladas de carga general y un muy bajo índice de commodities. Que
esas 9 millones que lo hacían brillante para el sistema, eran de y hacia los
ramales de la capilaridad. En cada etapa que le cerraron ramales bajó a 6 y 3
millones hasta los 90. Hoy que va hacia el brillo de los commodities no logra
superar el millón de toneladas por año.
Los señores fabricantes de desiertos, quieren un ferrocarril pequeño
dedicado a unos pocos negocios de interés foráneo. Los señores expresan
lapidarias frases de "no rentable", sin que se les mueva una pestaña
mientras mienten con qué pasarán con el resto de los habitantes.
Eso sí, seguro que se quejarán del tamaño de la Villa 31 y de las
dificultades para viajar diariamente desde su country en Pilar a su trabajo
ferroviario en Buenos Aires.