ACTUALIDAD
Es
por los vuelos del ex funcionario en taxis aéreos que pagó el empresario
ferroviario.
El
tango se baila de a dos. Y cuando un empresario paga dádivas a un funcionario
público ambos deben ir a juicio juntos. La Sala IV de la Cámara de Casación Penal determinó anteayer que
el dueño de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA), Claudio Cirigliano, y
Ricardo Jaime sean enjuiciados por el delito de dádivas en el caso en el que se
comprobó que el ex secretario de Transporte del kirchnerismo hizo viajes de
placer en taxis aéreos que pagó el empresario a quien el ex funcionario debía
controlar.
Juntos. El empresario Claudio Cirgliano y el ex secretario Ricardo Jaime, en 2006. Ahora irán a juicio juntos.
Cirigliano
había sido procesado por el juez Claudio Bonadio por haber pagado ocho de los
viajes que realizó Jaime entre 2006 y 2008 a Brasil y otros lugares de descanso con
familiares y amigos. Sin embargo los jueces de la Sala I de la Cámara Federal
Jorge Luis Ballestero, Eduardo Farah y Eduardo Freiler primero confirmaron el
procesamiento y luego determinaron que mientras Jaime debe afrontar un juicio
oral por haber recibido dádivas, Cirigliano, que las pagó, debía ser sobreseído
porque el plazo de prescripción era menor para el empresario que para el
funcionario.
Los
camaristas dividieron el delito en dos partes: el que recibe el dinero y quien
lo otorga. Germán Moldes, fiscal de la Cámara Federal
apeló ante la Cámara
de Casación y dijo que “la verdad objetiva es que hacen falta dos para bailar el tango y no hay
dádiva posible si uno no la otorga y otro no la recibe.
Porque
la materia aquí investigada, ese acto complejo de corrupción en que
intervinieron Jaime y Cirigliano, sostenido en el tiempo y materializado en
múltiples daciones y aceptaciones de ‘gratificaciones’ indebidas, es lo que
torna inescindibles los roles de ambos”. Moldes le había advertido que la Casación “es, quizás, la
última oportunidad de evitar que, en el tan llevado como traído ‘affaire’ de
los viajes en avión de Jaime, el opulento e influyente empresario que financió
esos vuelos, desencadenantes de tanto escándalo público, termine, (ya que de
vuelos hablamos) como en la copla del malogrado Rodrigo, ‘El Potro’: Y voló,
voló, se borró, borró. Porque pájaro que come, vuela como siempre me dijo mi
abuela ”. Los argumentos legales de Moldes fueron escuchados.
Los
camaristas de Casación Gustavo Hornos y Luis Geminiani determinaron que
Cirigliano tiene que ir a juicio igual que Jaime. En cambio Mariano Borinsky
votó en disidencia.
El
voto de Hornos señala que “no parece razonable afirmar que la suspensión del
curso de la prescripción de la acción penal opere solamente para el funcionario
público que admitió la dádiva, pudiendo dejar impunes a quienes se la
ofrecieron. Dicho de otra manera, si las dificultades para el esclarecimiento
del hecho delictivo se deben a que quien admitió la dádiva ejerce un cargo
público, y es jurídicamente presumible pensar que esta circunstancia pueda
entorpecer las investigaciones, no se presenta como una interpretación de la
ley jurídica no socialmente aceptable la conclusión de que la prescripción de
la acción penal no se suspenda para quien se la presentó u ofreció”.
Cirigliano
y Jaime deberán ir a juicio oral. La
Cámara de Casación terminó la discusión. Empresario y funcionario
en el mismo banquillo de los acusados por un delito de corrupción.Clarín
AH , NO ES POR 51 MUERTOS ??????
ResponderEliminarY... qué pasará luego, quedarán presos? Mas parece que todo no es otra cosa mas que "teatro", no pasa nada,todo queda ahí nomás. Blanco
ResponderEliminarPodriamos denominarlo "Las dos Caratulas" Puro Teatro.
ResponderEliminarO tambien Otra vuelta de tuerca.
Si ambos quedaran detenidos Argentina sería un país serio; pero lamentablemente eso no va a ocurrir.
ResponderEliminar