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Redacción CRÓNICA FERROVIARIA
Los
diputados Alejandro Bodart (MST) y Adrián Camps (Proyecto Sur), la Defensora del Pueblo
adjunta, Graciela Muñiz, varios comuneros y vecinos del Encuentro en Defensa
del Espacio Público presentaron hoy en la ANSeS de Avenida Córdoba al 700 una impugnación
al concurso de proyectos inmobiliarios para las obras en las ex playas
ferroviarias de Palermo, Liniers y Caballito.
Bodart
afirmó: "Estos concursos que son hijos del pacto PRO-K resultan
abiertamente ilegales. Violan la ley nacional 19.549 de procedimiento
administrativo y la ley porteña 4.477, que obliga a convocar a las Juntas
Comunales como observadores de los concursos de proyectos. Aquí ambos gobiernos
están atropellando todo rápidamente con tal de favorecer como sea los negocios
inmobiliarios."
Asimismo,
Bodart cuestionó duramente al arquitecto Mario Boscoboinik, ganador del
concurso para las playas de Palermo y a la vez Director General de
Fiscalización y Control de Obras del gobierno porteño: "Para dibujar los
planos que presentó al concurso, Boscoboinik hizo trabajar a profesionales de la DGFYCO , es decir del
Estado. Incluso imprimió allí sus planos, con los plotter y tintas que son
insumos públicos. Todo esto lo denunció dicho personal al jefe de la Agencia Gubernamental
de Control, Juan José Gómez Centurión. Boscoboinik, quien como funcionario
ahora 'controlará' sus propias obras -una aberración antiética-, hasta hace
poco presidía nada menos que la
Comisión de Ética del Consejo Profesional de Arquitectura y
Urbanismo."
Terrenos federales, ¿quién es el dueño de estos espacios y de su explotación?. Durante el menemismo (alquilado al peronismo) se quisieron hacer hacer negocios con estos terreno y no pudieron: ahora durante el Kircherismo (alquilado al peronismo) se están por concretar.
ResponderEliminarEsto es un negociado más, no importa, venderán cualquier cosa, seguirán regalando el patrimonio público por treinta monedas (bueno, seguramente bastantes más, pero mucho menos que el valor del tremendo perjuicio que ocasionan).
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con las impugnaciones a los proyectos de construcciones en las playas ferroviarias. Pero los argumentos que utiliza Bodart son insuficientes, son formales, de procedimiento. No va al fondo de la cuestión, ni fundamenta con la legislación adecuada. Si se corrigen los formalismos que denuncia su impugnación pierde fuerza. Debería profundizar su presentación.
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