Exterior
Mientras se mantiene la apuesta por la alta velocidad, las líneas de cercanías, regionales y de mercancías siguen esperando las ayudas necesarias para promover la movilidad sostenible en todo el territorio
La destacada aportación del ferrocarril al avance de la movilidad sostenible está sobradamente demostrada. Sin embargo, el gobierno español sigue sin apostar de manera decidida por el medio de transporte de personas y mercancías más sostenible. En este enlace puede compararse la huella de carbono de los diferentes medios de transporte respecto al tren.
Solo un par de datos al respecto: un kilómetro de doble vía de ferrocarril aporta una solución de transporte igual a la de 16 carriles de autopista en el mismo tramo, mientras que un tren de mercancías de 450 metros transporta una carga equivalente a la de 20 camiones de gran capacidad: todo ello con menos de la mitad de emisiones contaminantes.
Reivindicando ese destacado perfil medioambiental, ese importante papel del tren en el avance hacia un modelo de transporte más limpio y sostenible, la Alianza Ibérica por el Ferrocarril pide que los sistemas ferroviarios tengan un mayor protagonismo en las políticas destinadas a impulsar la lucha contra el cambio climático.
Las 14 organizaciones sociales, sindicales y ambientalistas de España y Portugal, fundadoras de esta plataforma, reclaman a los gobiernos luso y español que presten una mayor atención al servicio que nos presta el tren de uso cotidiano, que es el que vertebra territorios y facilita las necesidades de movilidad con equidad social y con el mínimo impacto ambiental.
Según esta organización, el interés de las administraciones parece centrarse exclusivamente en la alta velocidad, mientras que el abandono de los sistemas de cercanías, regionales y de transporte de mercancías han motivado que el 80% del territorio español esté actualmente desatendido, con un sistema ferroviario que no atiende a las necesidades reales de la población y la industria.
El hecho que ha provocado la creación de esta alianza en defensa del ferrocarril ha sido el reciente anuncio de cierre de la línea convencional Aranjuez - Cuenca – Utiel, que se une a la larga lista de despropósitos que se han ido sumando en los últimos años, como el cierre de las líneas de trenes nocturnos Madrid-Galicia, Barcelona-Galicia, Madrid-Lisboa e Irún-Lisboa, así como los de Madrid-París y Barcelona-París.
Según esta plataforma, para que se puedan cumplir los objetivos de descarbonización fijados por la Agenda 2030, es necesario el urgente trasvase de viajeros y mercancías al modo ferroviario, lo cual se contradice con la tendencia al cierre de líneas y la desatención que vienen sufriendo las existentes. Por ello exigen que se evite cualquier nuevo cierre de líneas de tren y se recuperen las líneas suspendidas.
En su lugar, las líneas de tren convencional deben renovarse, rehabilitarse, interconectarse y mejorarse para que presten un servicio eficaz y se conviertan en una alternativa real al transporte por carretera.
Como señalan desde la Alianza, debido al distinto ancho de vía, España y Portugal han venido representando históricamente una ‘isla ferroviaria’ respecto a Europa. A pesar de las grandes inversiones llevadas a cabo para implantar en España el ancho estándar, no se ha revertido esa situación, por lo que ambos países deben trabajar conjuntamente para mejorar las conexiones transfronterizas y converger definitivamente al ancho estándar del continente europeo.
Por todo ello, la Alianza Ibérica por el Ferrocarril propone a los gobiernos de España y Portugal la adopción y puesta en marcha de estas diez medidas urgentes: 1) A finales de 2022, todos los pueblos y ciudades de España en los que haya una estación en una línea operativa tendrán un mínimo de 4 servicios diarios de ferrocarril en cada sentido, con unos horarios que permitan al menos hacer un viaje de ida y vuelta a la capital provincial en el mismo día.
2) Presentación, antes de finalizar 2022, de un plan de refuerzo de los núcleos de Cercanías con menores prestaciones en la actualidad: Asturias, Bilbao, Cádiz, Málaga, Murcia-Alicante, Santander, Sevilla, Valencia y Zaragoza. Un plan que debe conseguir incrementar la demanda en un 75% en 2026 y el 150% al finalizar esta década.
3) Licitación de la compra de suficiente número de trenes, modulables y accesibles, para dar satisfacción a los puntos anteriores.
4) Presentación de un plan de revitalización de los servicios de ancho métrico, las redes de la antigua Feve y la línea C9 Cercedilla a Cotos, para dejarlos, antes de finalizar esta década, a un nivel similar a los actuales servicios de ferrocarril autonómicos: FGC (Cataluña), ETS (Euskadi), FGV (Comunidad Valenciana) o SFM (Mallorca).
5) Creación del abono de transporte, nacional y regional, antes de fin de 2023, de carácter mensual, trimestral o anual, que permita usar todos los transportes públicos de España, o de la región, más allá de los servicios de alta velocidad. El sistema suizo puede servir de modelo.
6) Antes de acabar 2022 se debe presentar un plan para conseguir la efectiva integración de la bicicleta en el acceso al ferrocarril, incluida la Alta Velocidad. El plan debe contemplar asimismo la construcción de suficientes aparcamientos seguros de bicicletas en las estaciones de ciudades de más de 25.000 habitantes. Un plan que debe garantizar, sin restricciones, gracias al material ferroviario modulable, la parada en todas las estaciones que den acceso a las distintas redes de espacios naturales peninsulares.
7) Poner en marcha un plan para impulsar los servicios transfronterizos diurnos de España con Francia y Portugal, tanto directos como con cambio fronterizo, para dejarlos homologados al mismo nivel que Francia disfruta con sus países vecinos del lado norte y oriental.
8) En coordinación con las autoridades europeas, antes de acabar este año, implementar los servicios transfronterizos nocturnos entre España y Portugal, Francia, Bélgica, Alemania, Suiza e Italia. Recuperación inmediata de los trenes nocturnos anulados en nuestro país. La entrada en servicio de la sección de Alta Velocidad Plasencia-Badajoz debe ir acompañada de un servicio nocturno Barcelona-Madrid-Lisboa.
9) Presentar, en 2022 un plan para que el ferrocarril transporte el 10% de mercancías en 2025 y el 18% al finalizar esta década, igualando la cuota media europea.
10) Diseñar, antes de fin de 2023, una fiscalidad favorable al uso del ferrocarril y la movilidad sostenible homologable con las mejores prácticas europeas.
Pueden consultarse todas las propuestas en el documento ‘Más viajes en tren, menos emisiones’, elaborado por la Alianza y en el que se detallan las bases para relanzar el ferrocarril en España y Portugal.ElConfidencial.es