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Lo advirtió el intendente de la ciudad vecina. Podría haber novedades una vez concluido el fin de semana extra largo.
El servicio de transporte de pasajeros que une la ciudad de Pehuajó con la estación de trenes del barrio de Once, en Capital Federal, podría dejar de funcionar. Así lo advirtió el intendente de la ciudad vecina, Pablo Zurro. "Siete años sin tren, logramos que vuelva y parece que se lo llevan", sostuvo.
A través de sus redes sociales, el mandamás pehuajense repasó la historia del ramal que permite viajar a un costo menor al del colectivo de línea y lamentó la decisión que podría tomar próximamente el gobierno nacional.
En agosto del año 2015, producto de la caída de dos puentes a causa de inundaciones, el servicio se vio interrumpido y el tren se limitó al tramo Once-Chivilcoy. No se reestableció hasta Pehuajó sino hasta fines de julio del año 2022.
Bajo la administración de Alberto Fernández, Pehuajó logró el regreso del tren de pasajeros y eso permitió viajar a menor costo que el de un colectivo de línea. "Los pehuajeses cada vez que salían pasajes a la venta los agotaban, porque el servicio es muy bueno y económico, más allá de la velocidad", indicó.
En la actualidad la diferencia de precios es grande: mientras un pasaje de colectivo sale alrededor de $21.000 a Capital Federal, el tren cuesta $4.000.
"Me preocupa la información que habría surgido de las máximas autoridades de Trenes Argentinos Operaciones, donde dan cuenta que después de Semana Santa el ramal Once-Pehuajó sería interrumpido, en un momento económico complicado, en el que los ingresos de la gente disminuyen y el resto, como alimentos, luz, gas, combustibles, aumenta", reveló el intendente.Presencia.com
Como de costumbre, se incluye al costo del pasaje como argumento para la preferencia del servicio ferroviario sobre el automotor. Pero ese costo no guarda ninguna relación con la realidad; los trenes de pasajeros está subsidiados en todo el planeta, pero que el subsidio deba ser de más del 90% carece de sentido y lo hace inviable. Nuestros ferrocarriles necesitarían un replanteo completo, lo que incluye una gigantesca inversión, que veo muy difícil en estos momentos.
ResponderEliminarLo único que podemos hacer es rogar que las medidas que se tomen de ahora en adelante no comprometan irremediablemente su existencia.
Ése es el problema del argentino promedio: quiere todo en la mano sin ningún esfuerzo. Si algún político implementa una política ferroviaria más realista termina fuera del Juego de Tronos argento. Randazzo fue un ejemplo de ello: cuando se pusieron trenes nuevos implementó aumentos tarifarios que promediaban el 100% del valor de cada boleto, argumentando que se debía pagar lo que corresponde por las obras que estaban en marcha. Y así le fue... hoy, mucha gente sigue saltando los molinetes en el AMBA, mientras que el resto del país reclama el tren "porque es barato".
EliminarY si bien es cierto que en casi todo el planeta se subsidia el tren, también es cierto que a pesar de eso el pasajero de esos países paga mucho más caro que acá por viajar en tren. El subsidio no equivale a gratuidad (o una situación cercana a ello) sino a solventar detalles puntuales sobre la logística que se requiere en cada situación... en sistemas ferroviarios que son mucho más avanzados que los de acá.
En qué país vivís?. Vos te crees que Argentina es del primer mundo?. Somos el país más pobre de América Latina con relación al sueldo mínimo en dólares. El psiquiátrico dijo que iba a sacar de un saque todos los subsidios del transporte, y dio marcha atrás, ¿por qué?, porque desde el FMI (ya es la máxima porque eso dice que está más a la izquierda que Milei y eso ya es mucho) les está pidiendo que no ahorquen tanto al pueblo por temor a que éste reaccione y ellos (siempre defendiendo sus intereses) no puedan cobrar lo que el país debe. Leo tus posteos y te veo como subido del púlpito, bajete y se un poco más social y humano.
EliminarCarlos Campolongo
ResponderEliminarTarde!! El alerta lo tendrían que haber tenido cuando metieron el sobre en la urna...
Gustavo Berisso
En realidad hubo muchas más alertas que nadie consideró en serio cuando ocurrieron:
Eliminar- La Crisis de 2001.
- Los incidentes con quema de trenes de pasajeros en 2005 y 2007.
- Varios descarrilamientos en el AMBA a lo largo de los años.
- La supresión del Santafecino en 2007.
- El ataque vandálico al Gran Capitán en 2011, que causó su supresión.
- Los incidentes que terminaron con heridos y o muertos (San Miguel, Once I y II, Empalme Maldonado, Castelar, etc).
- La continua degradación de los servicios operados por FerroBaires.
- La progresiva dilatación de los tiempos de viaje de todos los trenes de pasajeros en todo el país.
- La escasez de obras concretadas frente a todas las prometidas.
- Las compras de material rodante inadecuado y/u obsoleto, como por ejemplo la de 2007 a los ferrocarriles europeos.
- La supresión final de los servicios operados por FerroBaires; o mejor dicho, los que llegaron a estar operativos en 2015/6.
- La ejecución de las obras del soterramiento de la Línea Sarmiento y de los viaductos de otras tres líneas suburbanas sin una correcta planificación para su ejecución.
- La injustificada suspensión de casi todos los servicios con la pandemia de 2020 como excusa.
- Los descarrilamientos del Bahiense de 2022/3, que llevaron a su supresión.
...y otras alertas que ahora se me escapan a la hora de escribir este comentario.
ResponderEliminarQue pensaban cuando votaron a este impresentable de milei, somos el HASMERREIR del mundo, no pueden creer que tengamos semejante mamarracho en el gobierno
Oscar Castellon