Nota de Opinión
Por
Pablo Javkin (*)
Cuando
a finales de 2011 desde la Legislatura Provincial lográbamos que por unanimidad
se sancionara la Ley Nro. 13.242 de Reactivación del Sistema Ferroviario
Santafesino, estábamos dando un paso mucho más largo que una mera expresión de
voluntarismo; habíamos sentado las bases de una presencia provincial en la vida
del Riel dentro de nuestro territorio.
La
creación de la Empresa Mixta Ferrocarriles de Santa Fe S.A. (EFESA) es la base
para diferentes proyectos de vinculación física, encaminados hacia el concepto
del Transporte de Personas de carácter Universal; no sólo como servicio
público, sino como un verdadero derecho.
En
el caso particular del Área Metropolitana de Rosario (AMR), representa la
revalorización del capital que la región tiene en sus tierras y trazas
ferroviarias, para volver a utilizarlo con la finalidad a la que fue destinado
originalmente.
La
Ley de EFESA fue pionera en este sentido, y sin lugar a dudas, saludamos todas
y cada una de las iniciativas que con posterioridad, pensaron en el Ferrocarril
para el beneficio de la comunidad.
Hace
pocos días se inauguró formalmente la estación Rosario Sur, cabecera provisoria
del servicio de larga distancia entre nuestra ciudad y la Capital Federal. Sin embargo, mantenemos más vigente que nunca
la convicción de que ese y todos los trenes de larga distancia deben acceder a
la clásica estación Rosario Norte.
Nuestra postura no obedece en modo alguno a razones nostálgicas, sino
que responde a una necesidad práctica, donde el Tren debe estar lo más cerca
posible de la gente.
En
ese sentido, Rosario Norte posee una gran potencialidad que la convierte en el
nudo intermodal más importante de la región.
No sólo deben acceder a ella los servicios de larga distancia, sino que
la propia Ley de EFESA la considera como base para la mayoría de los trenes
regionales que se han proyectado para el AMR.
Rosario Norte está a escasos minutos del centro comercial, y es
equidistante a los cuatro puntos cardinales de la ciudad. A las tres vías bajo
techo, le siguen dos vías más al descubierto, y una calle interna que bien
podría utilizarse bajo el concepto de “Park &Ride” (estacionamiento pre y
post viaje), no sólo para automóviles, sino también para bicicletas públicas.
Rieles
en el tejido urbano
La
que fuera la conocida estación “Sunchales”, cobra mayor relevancia con los
proyectos que desde otros ámbitos de Gobierno se están elaborando.
Uno
de ellos es el Tranvía Metropolitano, que se proyecta desde el Centro
Universitario Rosario hasta la ciudad de Granadero Baigorria, con perspectivas
de llegar a Puerto General San Martín.
Este proyecto de largo aliento, en caso de poder concretarse, podría
interactuar con los servicios regionales y de larga distancia que se presten
desde Rosario Norte, o bien combinando con estos en la Parada Cruce Alberdi.
De
tal manera, se estaría retornando al Tranvía como medio de transporte limpio y
ecológico, aplicando la tecnología del Siglo XIX.
En
tanto, la consideración de instalación de un sistema de ferrocarril subterráneo
merece un análisis más meduloso, para evaluar su factibilidad y
gravitación. Es sabido que los costos de
instalación son verdaderamente altos, y si bien existe una plusvalía
exponencial en inmuebles de uso residencial y comercial ubicados en proximidades
de una línea subterránea, las inversiones iniciales dificultan la concreción de
la obra; a la vez que es menester ser muy responsable a la hora de evaluar el
mantenimiento posterior de un sistema de esa magnitud.
Sin
embargo, Rosario sueña con el Subterráneo desde la década de 1930, y fueron
grandes pensadores de la ciudad como Pedro J. Cristiáú, Oscar Mongsfeld –sólo
por citar dos de ellos-, los que vieron a futuro una urbe surcada por rieles en
su espacio subterráneo.
Los
modernos conceptos del transporte metropolitano masivo no se centran en un modo
en particular, sino en las necesidades concretas de cada medio. Así, quizás pensar en imponer un sistema sin
considerar las particularidades de la ciudad seleccionada no sea la mejor idea.
Expertos
internacionales de dilatada trayectoria, como el ingeniero rosarino José Luis
Moscovich, ya habían manifestado la factibilidad de aprovechar el subsuelo para
colocar un sistema de transporte sobre rieles.
Esta posibilidad -que no encuentra dificultad en la faz técnica aunque
sí en la financiera- se propone para el atravesamiento del área central, con el
doble propósito de evitar la presencia en superficie, para no entorpecer la
movilidad particular y ganar, a la vez, en velocidad comercial. Al respecto, hay que admitir que si hoy un
tranvía moderno se colocase en el centro, su velocidad comercial difícilmente
superaría los 17 Km./h; apenas un poco más veloz que el transporte automotor
existente en la actualidad. Es por ello que una solución soterrada para una
sección del área central, considerando un tren subterráneo a futuro pero
aplicando un tranvía en el mediano plazo, constituya quizá una variante a la
medida de Rosario, que a la vez enlace con la estación Rosario Norte para
combinar con trenes regionales y de larga distancia.
Esta
red primaria sobre rieles (Trenes y Tranvías), podrá complementarse debidamente
con una red secundaria compuesta por ómnibus y por líneas de Trolebús como la
actual y otras a reinstalarse.
En
este sentido, sentimos orgullo por nuestra Ley de EFESA, que una vez puesta en
vigencia plenamente, podrá complementarse por otras iniciativas como las que
por estos días está conociendo Rosario y su región, o como la ingresada esta
semana en la legislatura provincial por el diputado Eduardo Toniolli que, sobre
la base de esta ley, pide por la reactivación del servicio de trenes de
pasajeros entre Rosario y Villa Constitución.
Rosario
como otros municipios, hoy no discute trenes sí o trenes no, discute qué tramo,
de qué forma, a partir de qué modelo. Por eso, celebramos el debate y
destacamos los avances que nos conducen a planificar las ciudades que vamos a
necesitar en el mediano plazo y, en las
que la conectividad será factor de desarrollo, sustentabilidad, orden y, sin
duda, de convivencia social.
(*)
Autor de la ley para la Reactivación del Sistema Ferroviario Santafesino -
Diputado Nacional por Santa Fe CC – ARI