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Redacción CRÓNICA FERROVIARIA
Este sábado pasado, Crónica Ferroviaria tuvo oportunidad de hacer un
viaje en los trenes eléctricos de la Línea Sarmiento operada por la UGOMS para observar cómo se
cumplían los servicios de pasajeros. Cuando nos dispusimos a querer sacar pasaje,
las boleterías se encontraban todas cerradas y con un cartel que decía
"Viaje sin Boleto".
Boleterías estación Liniers (Lado Norte)
Primero, fue la sorpresa, y después el pensar si debíamos viajar de esa
forma, ya que al no tener un comprobante (boleto), de haber un accidente (no
exento hoy en ninguna línea ferroviaria de la zona metropolitana) no estaríamos
cubiertos por el seguro correspondiente.
Boleterías estación Haedo
Pero bueno, como amamos a este medio de transporte nos encomendamos a la Virgen de Luján (Patrona
del Transporte) subimos y esperamos con ansiedad su partida. La misma se
realizó (como ocurre últimamente) con atraso. Los coches llenos (aún siendo
sábado) y sucios a más no poder. De entrada olfateando ese tufillo muy
característico de la
Línea Sarmiento como lo es el de la marihuana. Pensábamos que
era algún vendedor de saumerios, pero no, era una caballero que venía fumando
su porrito muy tranquilamente. No viajábamos en el coche que van los que llevan
sus bicicletas donde generalmente ese olor es característico, si no uno
cualquiera de la formación. Bueno, no es para tanto, dentro de muy poco se va a
liberalizar la fumata y eso, seguramente, será algo corriente, así que habrá
que acostumbrarse.
A puertas abiertas
Siguiendo con nuestro periplo. Consultamos a los pasajeros si las
boleterías donde ellos subían estaban abiertas, y todos nos contestaban que no,
por lo que todos viajábamos gratis. Qué bueno!, o más bien, qué malo!, ya que
el Estado deberá, seguramente, pagar más subsidios. Después, seguramente las
estadísticas dirán que viaja menos gente, pero no es así, si se cobrara el
pasaje y se controlaría como debe de ser los números serían otros, y las
entradas también.
Ah!, policías y personal de seguridad, ausentes con aviso. Las
formaciones y estaciones, tierra de nadie.