Cartas de Lectores
Señor Director de Crónica Ferroviaria:
En el mes de Setiembre de 2013 se anunció en Mar del Plata, con la presencia
del señor Intendente Municipal de la Ciudad y un grupo de altos funcionarios
nacionales, el inicio de las obras de mejoramiento de 312 km. de vías del ramal
de Buenos Aires a Mar del Plata, así como la incorporación de nuevo material
rodante procedente de China. En ese acto el presidente de la ADIF.SE, señor
Ariel Franetovich, explicó los detalles de las obras a efectuar:
Puente ferroviario sobre el Río Salado del ramal Plaza C - Mar del Plata
* Ejecución de 20 Km de vía nueva en el tramo de desvío de la Ciudad de
Chascomús evitando que el ferrocarril atraviese el centro urbano de la ciudad.
* Seis etapas de renovación de vías entre las estaciones Chascomús-Maipu
y Vivoratá Mar del Plata (200 Km).
* Tres etapas de mejoramiento de vías entre las estaciones Maipu y
Vivoratá (92 km).
* La construcción de una vía doble entre Mar del Plata y Camet.
* La construcción de un nuevo puente sobre el Río Salado ubicado entre
las localidades de Lezama y Castelli.
* La Puesta en valor de la estación Ferroautomotora de Chascomús.
En ese mismo acto, el señor Franetovich aseguró que cuando se hubieran
cumplido el 60 % de las obras programadas se podría cumplir un servicio entre
Plaza C. y Mar del Plata en aproximadamente 4 horas 20 minutos. Esta afirmación
es otra más de las frecuentes expresiones voluntaristas de nuestros
funcionarios, siempre bien alejadas de la realidad técnica.
Considerando la lentitud para
llegar de Plaza C. a la estación Glew, las precauciones que deberán tomarse en
el resto donde se está trabajando, la precaución del cruce del puente sobre el Salado a 40
km/h, y la marcha lenta entre estaciones Camet y Mar del Plata, hablar de 4 horas 20 minutos suena
simplemente como una pretensión técnicamente inalcanzable.
Es cierto que las obras de renovación de vías se están realizando, se ve
esto claramente desde la Ruta Nacional Nro. 2, pero parece imposible que se
logre un avance suficiente hacia el inicio de la temporada de verano.
La obras del nuevo puente sobre el Río Salado ni siquiera han comenzado.
No hay aún un obrador en la zona, lo que hace pensar que ni siquiera deben
haberse licitado todavía. La no ejecución de esta obra fundamental es a mi
juicio particularmente grave. La sola observancia visual del viejo puente de
hierro da realmente miedo. Los durmientes se ven todos podridos. La precaución de cruce a 40 km/h. indica a
las claras cuál es el estado actual del puente.
La gran pregunta que uno se hace es: ¿Se ha evaluado el efecto sobre la
vieja estructura del mayor peso de las locomotoras chinas respecto de las
tradicionales GT22CW?. Estas últimas pesan 107 Ton. y las chinas modelo CKD8
pesan 120 tons. Esto es un 12.5 % más pesadas. Son serias las dudas que a uno
le asaltan viendo alrededor el permanente grado de improvisación de todo lo que
se relaciona con los ferrocarriles. Sería bueno conocer que estudios técnicos
se han efectuado para posponer la construcción del nuevo puente.
Tampoco se habló, en el anuncio de las obras, de cuál sería el sistema
de señalización. ¿Se seguirá utilizando el viejo, muy seguro por cierto, pero
obsoleto sistema de vía libre que sigue utilizando Ferrobaires?. Si esto es
así, las formaciones deberán aminorar la
marcha en todas las estaciones para recoger el “aro” de mano de los auxiliares. Esto comprometería aún más la
posibilidad de acortar los tiempos de viaje a los niveles que las autoridades
pretenden.
Ahora el Ministro del Interior y Transporte de la Nación, Florencio
Randazzo, anuncia sin mayores precisiones que el 21 de Noviembre comienzan las
pruebas para que este verano corran los nuevos trenes Chinos 0 km., y como de
costumbre se ve venir que otra vez asistiremos a inauguraciones de nuevos
servicios con obras a medio terminar, o ni siquiera empezadas, como el caso del
puente sobre el Rio Salado. Atte.
Luis Barletta