EXTERIOR
El sindicato de AFE (Unión Ferroviaria) advirtió que la inminente
disminución de la plantilla de esa empresa pública como consecuencia de la
implementación de un plan de retiros hará que quede con serias dificultades
operativas a partir de enero.
El presidente de la Unión Ferroviaria, Carlos Aramendi, dijo que los
primeros afectados serán los trenes a Treinta y Tres y a Durazno que
transportan combustible de Ancap y que también se verá perjudicado el
transporte de arroz, contenedores, piedra caliza y "clinker".
"En enero o febrero podemos quedar inoperantes porque el 31 de
diciembre se van 200 trabajadores, en enero por la Rendición de Cuentas (que
previó la redistribución de funcionarios) hay muchísimos compañeros que se van
a ir, y en 2014 está previsto que otros 200 se sumen al retiro
incentivado", dijo Aramendi a El País.
AFE traslada 1,4 millones de toneladas al año; el tramo a Rivera va con mayor carga. L.Carreño.
Un decreto del Poder Ejecutivo del pasado 17 de septiembre estableció
que podrán acogerse al retiro incentivado los trabajadores con más de 58 años
de edad y al menos 30 años de servicio en la empresa ferroviaria. Los que
percibían menos de $ 30.000 podrán recibir durante cinco años el 79% de la
retribución que hubiesen percibido entre el 1° de enero de 2012 y el 31 de
diciembre de ese año.
Quienes cobraban entre $ 30.000 y $ 32.500 recibirán el 77%; los que
tenían un salario de entre $ 32.500 y $ 35.000 el 75%; y los que cobraban hasta
$ 37.500 el 73%. Los funcionarios que cobraban más de $ 37.500 cobrarán el 71%.
El Ejecutivo presentó el plan de retiros incentivados como un intento de
rejuvenecer la envejecida plantilla de AFE y de eliminar focos de resistencia a
las transformaciones en la empresa. AFE tiene 951 trabajadores de los cuales
podrían retirarse 397. La empresa quedará autorizada a contratar un trabajador
por cada cinco retiros que se produzcan.
"No a todos les conviene que AFE se reflote como tiene que ser,
porque cuando hablamos de transporte de carga, hablamos de dinero. Hoy el
Ministerio de Transporte y Obras Públicas se gasta US$ 200 millones en
mantenimiento de rutas", sostuvo el sindicalista.
En un comunicado, el sindicato ferroviario señala que el expresidente
Tabaré Vázquez "optó por confiar la presidencia de AFE al Arq. (Antonio)
Galicchio, quién perdió cuatro años intentando convencer a alguna empresa
privada que invirtiera en recuperar vías a cambio del 51% de las acciones de la
empresa, apostando así a la privatización del ente".
El sindicato también acusa al presidente actual, José Mujica, de haber
rechazado todos los proyectos que se le presentaron para relanzar al
ferrocarril. Y defiende la gestión del expresidente de AFE, Jorge Setelich, a
quien Mujica le pidió que renunciara luego de que tuviese un fuerte
enfrentamiento con Pedro Apezteguía, director general de Secretaría del
Ministerio de Economía, quien es su primo, y a quien acusó de no valorar el
trabajo hecho para mejorar la situación en AFE.
Setelich, según el sindicato, "fue renunciado" por el
"grandísimo pecado de demostrar que una empresa pública puede ser
eficiente cuando funciona en un marco de respeto con sus trabajadores y su
sindicato, y reclamar del gobierno los apoyos prometidos".
El sindicato criticó a los gobiernos del Frente Amplio por lo que
considera sus políticas de "destrato" de los funcionarios al no
escuchar sus propuestas. "Estas pinzas que aplica el gobierno contra AFE,
falta de inversión, falta de apoyo, políticas de privatización, desprecio por
los trabajadores, son las que expulsan a los ferroviarios de la empresa pública
que tanto aman y defienden. Por eso el éxodo, amparándose en el retiro
anticipado y las próximas excedencias, no son más que las consecuencias
anunciadas por esta gremial ante la aplicación de la privatización y las
políticas de transporte del Gobierno, que sigue apostando al transporte
carretero", agrega el comunicado del gremio.
"El gobierno tendrá entonces la empresa de derecho privado que
quiere, sin los controles del Estado sobre sus gestores, pero AFE será una
empresa vacía y la operadora una empresa sin personal capacitado. Será tema de
investigación periodística las influencias de todo tipo que ejercen los grandes
empresarios de transporte carretero y de la construcción, sobre los
funcionarios del Gobierno, y su debilidad ante esas presiones", termina el
comunicado del sindicato.
El País trató de conocer la opinión sobre la posición del sindicato de
la nueva presidente de AFE, Carmen Melo, pero la funcionaria no respondió.
El ferrocarril, que había sido propiedad de capitales ingleses desde que
se inauguró el primer ramal en 1869, fue nacionalizado durante el gobierno del
presidente colorado Luis Batlle Berres en 1948. En 1952 se creó la actual AFE.
En la década de los años 80 se suprimieron la mayoría de los servicios de
pasajeros y la empresa se ha concentrado recientemente en el transporte de
carga. Hoy sus principales clientes son Saman (arroz), Ancap, Cemento Artigas,
Urupanel y Weyerhaeuser (ambas madereras).
El tramo a Rivera es el que tiene el mayor tonelaje transportado seguido
del que va a Río Branco. AFE traslada 1,4 millones de toneladas
anuales.ElPaís.com