Cartas de Lectores
Señor Director de Crónica Ferroviaria:
Es mucha valoración todas las informaciones para quienes, apasionados o
no, gustamos de este transporte, tanto de su faz técnica o derivados detalles.
También observo cuando es con un "criterio imparcial", con
fundamentos de opinión no políticos, que ayudan más de lo que uno pueda suponer
en beneficio general y no de réditos personales o indirectos sobre determinados
funcionarios.
La enorme y espectacular dimensión al cambio ferrocarrilero en nuestro
país, de una envergadura hasta en construcción, realmente asombra y da para
pensar. Lo visto personalmente y lo divulgado puesto en líneas integralmente
por Crónica Ferroviaria.
Falta mucho aún, y los lectores tenemos la providencia de dar testimonio
de bien o de ése falta mucho, en salvaguarda de los materiales y pasajeros.
Solamente un aspecto que dijera mucho tiempo atrás y corroborado por otros. Los
furgones de "libre fumata" y desde antaño, hasta el avance imparable
de las villas sobre vías o sectores que no debería ser, caso villa 31, y peor
paso de personas grandes y chicos, hasta.... que ocurra lo pensado. Es un tema
difícil sobre el San Martín-Retiro, pero no imposible, como lo solucionó el
Mitre.
Día a día se va sumando la desproporción de venta ambulante, con una
organización que se puede decir está a la vista, y otra que molesta pasando
aturdiendo a gritos insoportables diariamente. Alguno, hablado entre pasajeros,
determinado como "punga".
Final, si la tragedia de Once sirvió para esta remodelación
ferrocarrilera, como así se suele decir, bienvenida en desmedro de los deudos
en una justicia sabida, pero que no vuelva a suceder, ni tampoco escuchar al
ministro Randazzo diciendo: "liberaremos.., conectaremos.., mejoraremos..;
para otro .. construiremos...., beneficiaremos".
No hace falta otro agregado a la finalidad política que viene. Muchas
gracias, y Felicidades.
Rubens
Corrales
En nada difiere lo descripto en esta nota, de lo que es el resto de los demás aspectos del país: falta de represión (legal, se entiende) y connivencia de TODO el arco político para con el mundo del delito.
ResponderEliminarMuy bien!
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