Nota de Opinión
Por: Jorge de Mendonca (Presidente Asociación Intermodal de América del Sur AIMAS) (para Crónica Ferroviaria)
Igual que los aviones, los camiones, los buques, estos malditos trenes tienen la mala tendencia a descarrilar.
¡Sí!, patéticamente, un informe sobre un accidente del año 2023 recitaba (¡sí!, recitaba. No informaba o advertía), que "como los rieles tienden a dilatarse en verano, se sugiere reducir el tráfico y la velocidad en días de alta temperatura".
Creo que el informe suplementario debería decir "el funcionario que debiera vigilar por la ejecución de buenas prácticas reglamentadas, tiende a salvar su trasero dictaminando nimiedades".
"Como el aeropuerto hace tiempo que no se utiliza, pues e sugiere demolerlo"
"Como el río nunca tuvo un puente, pues queda demostrado que el puente no resulta necesario"
"Como suponemos que la fatalidad es una certeza, recomendamos no construir caminos; no habilitar vías; no navegar ríos"
"Como la cordillera de los Andes es muy alta, y casi no la cruza nadie, se entiende que no son necesarios los cruces de la cordillera"
No considero necesario pedir disculpas, pues como las quejas fundadas en evidencia tienden a no lograr cambio de rumbo, tal no lo pudieron conseguir ni aquel piloto psiquiatra cineasta, ni mí amigo Daniel C. para evitar el accidente de LAPA del año 1999, ni el de la estación Once de Septiembre del año 2012, entonces esta queja mía no debiera fundar demanda alguna por parte de los implicados de siempre, pues nunca van a prisión y sus plumas continúan describiendo excusas convincentes.