Redacción y fotos: CRÓNICA FERROVIARIA
Anoticiados por nuestros colaboradores sobre la no circulación del turístico Tren de la Costa que va desde estación Maipú hasta Delta (Tigre) en un recorrido de 15,5 km., pasando por Borges, Libertador, Anchorena, Barrancas, San Isidro, Punta Chica, Marina Nueva, San Fernando y Canal, nos hicimos presentes este fin de semana en la cabecera Maipú para cerciorarnos de cuál era el problema que aquejaba la suspensión de los servicios.
Impactos de piedras en el parabrisa
Efectivamente, los empleados de la empresa nos informaron que dicha paralización fue por 5 días debido a un conflicto gremial; pero el viernes pasado el mismo fue solucionado y los servicios empezaron a cumplirse, no sin los inconvenientes que desde hace tiempo viene teniendo la empresa Tren de la Costa, debido al deterioro constantes de las formaciones que fueran construidas por la empresa Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) y de la falta de repuestos para la reparación del 80% de los trenes que se encuentran parados en sus talleres ubicados en la estación San Fernando.
Carteles indicadores sin funcionar
Abandono total
Vía de andén 1 oxidada por falta de uso
Es así que este fin de semana los servicios se cumplieron con solamente dos formaciones (dupla) con trenes cada media hora, "siempre y cuando no se rompa una de ella o las dos, lo que hace que tengan que suspenderse los itinerarios hasta su reparación, cosa que ha ocurrido en varias oportunidades", nos dijeron.
Los empleados con los que pudimos charlar estaban muy aflijidos por los constantes problemas de todo tipo que acucian a dicha empresa, por lo que nos describieron un negro panorama que, de seguir así, "sin inversión de ninguna naturaleza y sin importarle absolutamente a nadie sobre qué hacer con el Tren de la Costa, éste muy pronto, indefectiblemente, deberá interrumpir sus servicios hasta que alguien se digne a tomar en serio cartas en el asunto", expresaron.
¿Quién paga?. ¿Está también subsidiado?
Observando el panorama después de un año de no visitar dicha línea ferroviaria, pudimos ver en una sola estación que estuvimos el deterioro sufrido en el mobiliario y sus adyacencias.
Después las autoridades nacionales hablan desde el púlpito de la resurrección de los trenes. Se ve que nadie recorre los ferrocarriles y que nada les importa de los trenes.