EXTERIOR
ABC ha tenido acceso a la denuncia de los hechos, en la que se destaca que el asunto no fue a peor gracias a la rapidez y pericia de los conductores de los 13 convoyes afectados
ABC ha tenido acceso a la denuncia presentada hoy por Metro de Madrid ante el Decanato de los Juzgados de Instrucción de Madrid. En ella, el consejero delegado de la compañía, Ignacio González Velayos, expone las circunstancias en que se practicó el acto vandálico.
El sabotaje se produjo exactamente entre laqs 8.27 y las 8.38 horas del miércoles. Un grupo de personas, de forma coordinada y sincroniada, paró 13 trenes "de forma casi simultánea" en nueve líneas, "aprovechando que se encontraban realizando su parada en las estaciones afectadas".
Gráfica detallada de cómo afectó el sabotaje, minuto a minuto
En todos los casos se hizo accionando el freno de urgencia, "de forma coordinada y sin causa justificada".
Según la denuncia, la intención de los vándalos fue "lograr, a través de una acción colectiva en grupo, un grave perjuicio al servicio ferroviario, perjudicando a los viajeros y perturbando la paz pública".
Los conductores no vieron a los autores
"La rápida reacción de los conductores de los trenes -continúa- hizo que los mismos advirtiesen la realidad de la situación, procediendo a rearmar los timbres de alarma en pocos minutos. Los conductores de los trenes no visualizaron personalmente a las personas concretas que habían accionado las palancas de freno".
Así, el servicio sufrió una "perturbación significativa", que fue inferior a lo que en teoría debería haber sido "si no llega a ser por la rápida reacción de Metro y la pericia de sus conductores".
Hubo que aumentar la diferencia de tiempo entre el tren afectado y el siguiente. Ello supuso que afectase el sabotaje a 8.000 usuarios y se tradujera la acción en la pérdida de unas 1.500 horas laborales.
Metro concluye que se trató de "un acto de sabotaje organizado, el cual, de no haber sido por la rápida intervención de Metro y la pericia de sus conductores, podría haber ocasionado la completa paralización del servicio y gravísimo perjuicio al conjunto de la ciudadanía de Madrid".
Hasta 5 años de cárcel e indemnización
La compañia pide que se impute a los implicados por un delito de desórdenes públicos, que prevé una pena de prisión que va de los seis meses a los tres años. En caso de que sea un delito agravado, la pena se incremente de 1 a 5 años de cárcel.
También se les pide una indemnización de los daños y perjuicios que haya ocasionado.ABC
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Usted podrá dar su opinión libremente, pero aquellos comentarios que vengan con insultos, improperios, etc. y sin colocar nombre y apellido, nombre y/o pseudónimo (debajo del mismo) no serán publicados.