ACTUALIDAD
Por el
auditor Alejandro Nieva
El último
informe aprobado por la
Auditoría General de la Nación sobre las compras de material ferroviario
a España y Portugal es para indignarse largamente y puedo explicarlo
sencillamente así: se compraba no se sabía bien qué, tampoco bien para qué, sin
verificar aquello que se recibía, y todo a unos precios exorbitantes que se
pagaban sin controlar.
Se gastaron
unos mil seiscientos millones de pesos en vagones y locomotoras de las cuales,
casi la mitad está en desuso y tirada. El procedimiento deja de ser increíble
cuando se advierte que esta modalidad fue la predominante durante todo el
infausto período en que Ricardo Jaime y luego Juan Pablo Schiavi condujeron la
secretaría de Transporte de la
Nación (la auditoría comprende las compras realizadas entre
2004 y 2010).
La ausencia
de política ferroviaria se ve claramente en estas contrataciones donde sin
ninguna fundamentación (técnica, económica y jurídica) se malgastan
instrumentos institucionales (acuerdos de cooperación internacional) y recursos
económicos.
auditor Alejandro Nieva
Los hallazgos
más importantes de esta importante auditoria son los siguientes:
-La AGN observó indefiniciones e
imprecisiones en relación al objeto de los contratos, tal como la
indeterminación del material rodante que se adquiere y el estado del mismo.
Indefinición sobre el alcance de la asistencia técnica que se contrata y el
alcance de las reparaciones. Esto hace imposible determinar la cantidad y
calidad de los bienes adquiridos y si el negocio responde a criterios de
economía, eficiencia y eficacia.
“Existe una
obligación elemental de precisar el objeto de los contratos. Al incumplir dicha
obligación se genera incertidumbre a la hora de verificar cuales son los
derechos y obligaciones de las partes.”
- La AGN también detectó que los
expedientes de contratación carecen de elementos claves, tales como la falta de
acreditación de actas de recepción, falta de intervención y dictamen del
servicio jurídico del estado, informes técnicos y económicos.
- No constan
análisis integrales respecto a los aspectos económicos, técnicos y comerciales
que fundamenten la razonabilidad de las adquisiciones realizadas.
“Esto puede
verse en los acuerdos con España donde se verificó que en los contratos
celebrados en los años 2005/2006 y 2007 /2010 no se realizaron análisis de
razonabilidad de precios conforme calidad y características del material
adquirido, donde se incluyan la totalidad de gastos involucrados que componen
el precio final contratado, como así tampoco un análisis que permita estimar la
vida útil del material luego de las reparaciones”.
- Tampoco se
realizaron análisis sobre la factibilidad de los servicios a cumplir con el
material adquirido que permita inferir la conveniencia de las adquisiciones.
- Respecto de
los contratos con Portugal se detecto que en el caso de los coches adquiridos
fabricados en los años 1956/1967 no se incluyó un análisis de la adecuación y
conveniencia del material ofertado a los servicios preestablecidos.
- Es el caso
de las triplas eléctricas SOREFAME afectadas inicialmente al servicio eléctrico
del ex ferrocarril Roca, las mismas fueron paulatinamente adecuadas para ser
reutilizadas en servicio traccionados mediante locomotoras Diesel. Este cambio
de uso es demostrativo de la inconveniencia de la compra, ya que los coches
remolcados (utilizados en servicios de tracción diesel – eléctrica) resultan
sustancialmente mas económicos que lo abonado por esas triplas eléctricas,
diferencia que se acrecentará con el costo de las adecuaciones al nuevo
servicio.
- Tampoco se
incluyeron en los estudios de precios analizados, opinión o formulación de los
gastos referentes a fletes, tanto terrestres como marítimos, seguros de transporte,
etcétera, lo que incide entre 30
a 50% en el precio final de los coches adquiridos.
- Del informe
surge que el 44% del total del material adquirido se encuentra fuera de
servicio, sin que se efectuaran las tareas de reparación necesarias para su utilización.
En el caso de las compras a España del total de material rodante el 58% se
encuentra fuera de servicio, mientras que en el caso de aquél comprado a
Portugal es un 22%.
- El informe
destaca la falta de un representante de la Secretaría de Transporte
al momento de la entrega de los bienes adquiridos.
- Los
contratos omitieron la obligatoriedad de la suscripción de actas de entrega y
recepción como recaudo para efectuar el pago, lo que terminó debilitando los
controles del Estado e introdujo un riesgo adicional en la ejecución de los
mismos.
En el caso de
las compras efectuadas a España, una perla para entender la calidad de la
compra es la declaración del transportista que en la carta de conocimiento de
embarque de marzo de 2007 dice: “la carga es usada y se encuentra en muy pobres
condiciones con roturas visibles y partes faltantes; que el plástico envolvente
del material prácticamente se ha perdido y que no es conveniente para las
condiciones del mar, por ello el navío y el propietario no se hacen
responsables de cualquier daño causado en virtud de los comentarios
antedichos”.
Entre los
hallazgos del informe se detecta que no se inspeccionó la totalidad del
material rodante que se adquiría.
El informe de
la Auditoría
es un aún más generoso en detalles y observaciones, que son graves, y que nos
muestran sólo un aspecto de la deficiente gestión en materia de transporte
ferroviario. Nosotros señalamos también en otros informes que la Secretaria de
Transportes a través de la resolución 187/06 establecía un sistema poco
transparente para las contrataciones en materia ferroviaria. Dijimos que esto
explica el estado actual de deterioro de la infraestructura y la mala calidad
de los servicios a pesar de los enormes recursos e innumerables subsidios con que
ha contado el sistema.ElLibertario