Actualidad
Redacción Crónica Ferroviaria
Estábamos a punto de dejar por hoy de informar a nuestros lectores sobre las noticias ferroviarias, cuando nos llegó, cuando no, la mala noticia de que otra formación de la empresa Trenes Argentinos Cargas tuvo otro descarrilamiento.
Esta vez le sucedió al tren de carga 5001 que transportaba contenedores, y cuando se encontraba hoy circulando por el Km. 61 del ramal CC de la Línea Belgrano a la altura de Almirante Irízar, cercana al Parque Industrial de Pilar, se descarrilaron algunos vagones portacontenedores producto, al parecer, de que la vía se encontraba anegada de agua debido a las últimas lluvias registradas en el día de hoy.
Lo triste es que de conocerse que las vías estaban inundadas, y sabiendo el pésimo estado de las vías, se debería de haber enviado una zorra de inspección de vía para antes darle el visto bueno de circulación a la formación ferroviaria. Pero lamentablemente, hoy todo esto no existe y se despachan trenes a la buena de Dios.
Así es como en la mayoría de los casos pasan estos accidentes.
Redacción Crónica Ferroviaria
Estábamos a punto de dejar por hoy de informar a nuestros lectores sobre las noticias ferroviarias, cuando nos llegó, cuando no, la mala noticia de que otra formación de la empresa Trenes Argentinos Cargas tuvo otro descarrilamiento.
Esta vez le sucedió al tren de carga 5001 que transportaba contenedores, y cuando se encontraba hoy circulando por el Km. 61 del ramal CC de la Línea Belgrano a la altura de Almirante Irízar, cercana al Parque Industrial de Pilar, se descarrilaron algunos vagones portacontenedores producto, al parecer, de que la vía se encontraba anegada de agua debido a las últimas lluvias registradas en el día de hoy.
Lo triste es que de conocerse que las vías estaban inundadas, y sabiendo el pésimo estado de las vías, se debería de haber enviado una zorra de inspección de vía para antes darle el visto bueno de circulación a la formación ferroviaria. Pero lamentablemente, hoy todo esto no existe y se despachan trenes a la buena de Dios.
Así es como en la mayoría de los casos pasan estos accidentes.