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Redacción CRÓNICA FERROVIARIA
En un
comunicado de prensa emitido por el Ministerio del Interior y Transporte
informa que Florencio Randazzo encabezó hoy una videoconferencia con los
principales ejecutivos de la empresa China CSR, fabricante de los nuevos coches
para las líneas Sarmiento y Mitre, quienes confirmaron que ya comenzaron “con
el desarrollo de la ingeniería de los nuevos coches para ambas líneas” y que
“éstos comenzarán a llegar a la
Argentina en 13 meses, tal cual lo estipula el contrato”.
Randazzo, que
estuvo acompañado por funcionarios del Ministerio, subrayó “la importancia de
que haya un estricto cumplimiento en el plazo comprometido para la entrega de
las 25 formaciones para el Sarmiento y las 30 para el Mitre”.
En ese
sentido, el presidente de CSR, Zhang Zaizhong y el vicepresidente Quingdao
Sifang, señalaron ser conscientes “de la importancia que tiene para el Gobierno
argentino este tema”, y agregaron: “Queremos que le transmita a la Presidenta de la Nación que ya comenzamos a
trabajar muy fuertemente en la fabricación de los coches y vamos a cumplir con
lo que firmamos”.
La
videoconferencia, una modalidad que Randazzo tomará como habitual para el
contacto directo con las empresas chinas encargadas de la fabricación de
trenes, se extendió durante 40 minutos en los que se habló de los detalles
acerca de los coches que serán destinados para la línea Mitre y Sarmiento.
Dichas formaciones cuentan con la más moderna tecnología que garantiza el
confort, la velocidad y la seguridad en el viaje.
Los
ejecutivos de CSR también se mostraron muy satisfechos con la velocidad con la
que se avanzó en el pago del anticipo de parte del Gobierno argentino, por 164
millones de dólares, y en ese sentido garantizaron que “se trabajará con
celeridad en la fabricación de los trenes”.
Mediante las
gestiones encaradas por Randazzo a pedido de la presidenta Cristina Fernández
de Kirchner, el Gobierno nacional consiguió el precio más bajo del mercado en materia
de adquisición de trenes eléctricos, ya que se pagará 1.270.000 dólares por
cada coche, la mitad del precio que habían pedido otras empresas del mercado.