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Redacción Crónica Ferroviaria
Hoy todos nos despertamos con la triste noticia de la invasión por parte de la Federación de Rusia a la República de Ucrania, donde en forma instantánea se levantaron voces en todo el mundo de repudio y de que Rusia revea la situación y vuelva todo a fojas cero.
Enseguida, tanto el Bloque de la Unión Europea como de los Estados Unidos de América del Norte y otros países, se unieron para sancionar económicamente a la Federación de Rusia, cuyas medidas anunciadas a principios de esta semana afectan a varios bancos y empresarios rusos y apuntan a la capacidad de Moscú para recaudar dinero en los mercados internacionales de deuda, pero se esperan otras más graves, que hará imposible cualquier transacción comercial con ese país.
Recordemos que Argentina en reciente visita del Presidente de la Nación, Alberto Fernández, se habló de la firma de un contrato para la compra de 560 coches eléctricos Ivolga a la empresa rusa Transmashholding (TMH) por un valor de 846 millones de dólares.
El modelo Ivolga se basa en una plataforma EMU de vía ancha (1.676mm) y es un producto desarrollado y fabricado por TMH en Tver (Rusia). El EMU para Argentina es un tren de acero inoxidable de 25 kV con una velocidad máxima de 120 km. por hora y puede transportar hasta 2.000 pasajeros en su configuración (formación) de 8 coches.
Ahora queda el interrogante de que una negociación de estas características con Rusia nos pondría en un lugar de observación de los países que están a favor de sancionar económicamente a dicho país, y lo que pueda suceder con la oposición en nuestro país que es proclive a no realizar transacciones comerciales con la Federación de Rusia.
Ahora veremos cómo reaccionará el gobierno nacional, si sigue adelante con dicha compra o, de lo contrario, la enfría hasta ver qué pasa.
