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26 de octubre de 2021

Una medida nefasta, estúpida e intolerante la de prohibir sacar fotos por parte de las empresas ferroviarias estatales y privadas

Cartas de Lectores

Señor Director de Crónica Ferroviaria:

De mi consideración: 

Hace años que soy entusiasta del transporte ferroviario; he visto como en nuestro país poco a poco han destruido una de las redes más importantes del mundo. 

Por información en diversos medios de comunicación, ya sea de tinte electoralista u otro motivo, nos llenan de anuncios por nuevos servicios a implementarse, algunos de los mismos no es otra cosa que poner o rehabilitar algunos quitados en años anteriores.

En el AMBA la situación es como hace años, con la diferencia que es material nuevo. Se han puesto en valor estaciones y entornos, la mayoría copiado de países europeos, todo sea bienvenido.

Desde la vista de un aficionado, poco es lo novedoso para realizar fotografías, y dentro del ámbito de quienes nos dedicamos a retratar nuestras líneas en reiteradas ocasiones, nos topamos con un inconveniente, que es que en más de una oportunidad se debe soportar situaciones bastante desagradables.

Quién no ha visto en las estaciones, y en menor medida su entorno, personal de seguridad, menciono las empresas Murata o Ci5 como ejemplo, y no debemos, como suele mencionarse, "meter a todos en la misma bolsa". 

Personalmente puedo decir, también a conocidos míos y a los que se le debe sumar muchos casos de fotógrafos del riel, que verdaderamente la hemos pasado muy mal con la prepotencia de esta gente de seguridad, que muchas veces toleran que los usuarios crucen las vías en lugares no habilitados para tal fin, o que se tiren del andén para subirse al otro, entre otras anormalidades, pero si ello ven a alguien blandiendo una cámara fotográfica o el celular para sacarle una fotografía a un tren, ya se ponen como locos como si se tratara de algo fuera de la ley o de algún acto del recontra espionaje tipo Agente 86. La verdad, algo inédito y retrógrado.

Lugares tales como Tapiales, donde puede verse un ejército de personal de seguridad en su mayoría "hueveando", pero eso sí, mirando que nadie tenga cámaras fotográficas porque se ponen loquitos. 

En estaciones como Domingo Cabred, Luján, Dr. Antonio Sáenz (nueva), Sáenz Peña (para dar un ejemplo) o lugares impensables pasa lo mismo, a tal punto, como estar en un paso a nivel y que esta gente se aparezcan con moto para no sólo prepotear a quien saca fotografías, como en otros casos que hemos vivido, también amenazarnos.

Hace poco en un paso a nivel de la Línea San Martin lo hicieron con un joven que no pasaría los 15 años, en Tapiales otro tanto; en Luján llegaron a perseguir hasta un lugar algo apartado de la estación, sentido Jauregui, estos "uniformados" con aires de grandeza y poder, creyéndose que por el sólo hecho de tener uniforme, los hace superiores. 

En estación Dr. Domingo Cabred dentro del "hobby" es lugar típico para tener problemas; en estos días un lugar tranquilo como Marcos Paz (Línea Belgrano Sur) comenzó con esta "caza" de aficionados por personal de seguridad. A los mencionados casi nunca se los observa, pero el olfato a una cámara los hace salir de su resguardo e increpar a quien esté en la tarea de captar la imagen que tanto anhela el aficionado, EL TREN. 

Esta estupidez humana de impedir sacar una fotografía a una formación, estación, etc., que no es un submarino o destructor nuclear de última generación con armamentos sofisticados y secretos, no se registra solamente en la zona del AMBA, existen casos en Bahía Blanca Sud, Córdoba (Línea Mitre), etc. y un larguísimo etc.

También debo comentar que muchos trabajadores que laboran en el ferrocarril y son aficionados tampoco han escapado de las garras del personal encargado de la "seguridad". 

En la mayoría de los casos se los puede ver chateando por celular, u otras cosas que no son inherentes a su función, puede existir y ha ocurrido que inadaptados vandalizaron formaciones, y en el peor de los casos hasta le han prendido fuego, por supuesto la vista gorda para otro lado, alguien con cámara no es peligroso para sus ínfulas, pero un grafitero o vándalo, sí.

Esperemos que no llegue el dia y situación con estos personajes de uniforme, que aparte de una clásica discusión en ocasiones violentas ya que ellos mismos las provocan, que se llegue a la violencia física y haya heridos. Entonces los responsables serán los que bajan de los estamentos medios de las empresas ferroviarias este tipo de prohibición nefasta, estúpida e intolerante 

Por lo expuesto, las autoridades de las distintas empresas de Trenes Argentinos debieran tomar cartas en el asunto, y dar órdenes precisas a las empresas contratadas para que no sólo capaciten correctamente al personal, sino no causen molestias a quienes sacan fotografías, con cámara o celular. 

Países del hemisferio Norte es algo común y poseen trenes muchísimos más modernos y otra tecnología que Argentina, aquí todavía no hemos llegado a ese nivel de transporte. ¡Oh! paradoja, muchas veces suele verse en publicidades de Trenes Argentinos fotografías de aficionados, quienes son perseguidos por personal que ellos mismos a través de empresas tercerizadas contratan. 

Espero pueda llegar a buen término esta carta y por intermedio de su medio llegue a las autoridades pertinentes para una solución. Atentamente                       

Rogelio Rodríguez

roroelduque@outlook.es