EXTERIOR
De los 3.027 accidentes de tren que hubo en Europa
en 2009, 174 tuvieron su origen en el material rodante. La seguridad
ferroviaria está en el punto de mira.
Y al mismo tiempo, el transporte en tren sigue
creciendo. Entre el 2005 y el 2050 se espera un aumento del transporte de
mercancías de un 80 por ciento, y un 51 por ciento el de pasajeros. Con este
aumento, crece también el riesgo.
Para mejorar la seguridad, en Lovaina, Bélgica, un
proyecto europeo de investigación estudia cómo controlar el estado de los
trenes analizando el sonido y las vibraciones que producen. En ello está
trabajando Tom Vanhonacker, Director del Sistema Ferroviario de APT.
“Instalamos dos o tres sensores en la vía, y medimos e identificamos cada tren
en todas sus ruedas, que al pasar por el sistema las identifica e inspecciona.
Así sabemos si hay algún defecto.”
El sistema, basado en la monitorización de
vibraciones de alta frecuencia, no es caro, es muy preciso y no ocupa mucho
espacio. Los sensores captan las vibraciones cada vez que pasa el tren. Un
dispositivo recoge los datos y los transmite a la central. Analizando las ondas
que genera el tren al pasar, los investigadores detectan si se ha deformado
alguna rueda.
Frederik Vermeulen también trabaja en el proyecto.
“Recogemos datos las 24 horas del día. Aquí podemos ver que cuando pasa el tren
se marca un pico. Medimos su aceleración, y vemos si se sale de los límites
normales, si está pasando algo raro.”
En Varsovia otro proyecto de investigación europeo
utiliza ultrasonidos y escáneres digitales para controlar el estado físico de
las vías del tranvía.
Son nuevas inspecciones no invasivas, que permiten
detectar el estado del material a través de las vibraciones de los metales. Sin
tener que hacer obra, pueden determinar si hay puntos críticos debido a la
oxidación en el fondo de la vía.
Además, un escáner visual proporciona imágenes de
su superficie, nos cuenta el investigador Christopher Johnson. “Aquí tenemos un
escáner de alta velocidad, que alcanza una frecuencia de 36 kilohercios, que te
da una velocidad de lectura de unos 40 kilómetros por
hora. La luz es clave para el análisis de la imagen. La idea es conseguir una
imagen muy uniforme que no necesita procesado.”
La tecnología digital aplicada al mantenimiento de
las vías reduce costes y mejora la fiabilidad del sistema. El beneficio más
inmediato, es que no será necesario suspender los servicios de transporte tanto
como ahora, teniendo, al instante, un conocimiento muy fiable del estado de las
líneas.
Nicolas Furio coordina el proyecto PM’ n’ IDEA.
“Las vías son un sistema muy complejo. Con este proyecto hemos hecho un
progreso muy importante, estudiando muchas partes de sus componentes. Nuestro
siguiente objetivo es conseguir una herramienta integrada que analice toda la
vía de una sola vez.”
En Lisboa se identifican y controlan todas las
unidades que circulan en la línea de Cascais con un sistema de radio
frecuencia. Un sensor acústico en la vía captura el sonido que producen las
ruedas. Midiendo estos datos, se pueden detectar posibles averías, explica
Spyridon Kerkyras, Director Técnico de la empresa Feldman. “Actualmente
utilizamos transductores, que se acoplan a la vía y cuando el tren se acerca
tenemos un dispositivo basado en ultrasónicos que detecta que llega el tren y
enciende los lectores de datos.”
Así se analizan todas las unidades y sus
componentes. Los datos llegan inmediatamente al servidor central, ofreciendo
información sobre el estado del material rodante. Miguel Areias es Director de
Innovación de EMEF. “Es como si tuviésemos un agente en cada tren, que nos
ayudase a hacer un diagnóstico. Un sistema de alerta temprana sobre todo lo que
puede crear problemas en la circulación de trenes es muy útil, porque puedo
tenerlo en cuenta durante el mantenimiento.”
Dejamos Lisboa y llegamos a Bélgica. En Amberes, un
consorcio está construyendo una nueva línea de tranvía, que gestionará durante
30 años. Han instalado el sistema desarrollado en Lovaina. Saber qué puede ir
mal antes del mantenimiento supone un gran ahorro, según el ingeniero Gillis
Jan.
“Antes de instalar este sistema, cada dos o tres
meses las unidades necesitaban una inspección visual tanto si había algún
problema como si no. Con este sistema puedes poner fin a los errores humanos.
Si no ven nada, el sistema puede dar una respuesta más precisa de lo que le
pasa al tranvía.”
Las investigaciones científicas sobre las vías
ferroviarias continuan. Las nuevas soluciones tecnológicas ofrecerán sistemas
de alerta temprana más sofisticados, abaratando por tanto el coste de la
seguridad ferroviaria. Mayorkinos Papaelias coordina el proyecto Safe Rail. “El
sistema que hemos desarrollado está basado en una estructura abierta, para que
pueda convivir con los que ya existen en las líneas. La ventaja de la
tecnología que hemos desarrollado es que el coste es bajo e instalarlo requiere
una mínima intervención.”
Gracias a estas investigaciones el transporte
ferroviario del futuro en Europa será mucho más seguro.Euronews
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http://es.euronews.com/2012/05/18/europa-investiga-como-mejorar-la-seguridad-ferroviaria/