Exterior
Renfe mantiene aún abierto hasta el próximo 28 de febrero el plazo para
recibir solicitudes de adhesión al ERE, firmado con sus tres sindicatos
mayoritarios a comienzos de mes y que afectará a alrededor del 3,3% de una
plantilla que presenta una media de edad de 51 años.
Renfe ha recibido peticiones de un total de 670 trabajadores para
sumarse al expediente de regulación de empleo (ERE) voluntario y universal
abierto en la compañía, según informaron a Europa Press en fuentes del sector.
De esta forma, la operadora ferroviaria supera en un 34% el objetivo de ajuste
de personal que se fijó para este año, establecido en 500 de empleados.
En el caso de Adif, donde el plazo de adhesión al ERE ya culminó, un
total 404 empleados pidieron ser voluntariamente incluidos en el expediente,
casi el doble respecto al máximo de 250 empleados que contempla la medida.
En el caso de Renfe, entre el total de empleados que han pedido ser
incluidos en el ERE figuran una veintena de directivos, si bien el grueso de
las solicitudes (el 39,5% del total, 265 trabajadores) provienen del colectivo
de maquinistas, y otro 23,8% (160 efectivos) son trabajadores de los talleres
de mantenimiento, según informaron a Europa Press las mismas fuentes.
Indemnización Los trabajadores de Renfe que se incluyan en el ERE
recibirán una indemnización de veinte días por año, con una "media
máxima" de catorce mensualidades. En concreto, según lo acordado, el
número de mensualidades a percibir decrece progresivamente, desde las 16
contempladas para los empleados de 59 años de edad hasta las doce previstas
para los de 65.
La compañía ferroviaria tiene consignado en sus cuentas de 2014 un monto
de 14,9 millones de euros para atender el coste del ERE, con el que busca
"alcanzar sus objetivos de rentabilidad y sostenibilidad, y responder a
los retos de productividad necesarios en un mercado competitivo". Durante
una reciente comparecencia en el Congreso, el presidente de Renfe, Julio Gómez
Pomar, descató el expediente como una "buena medida para la compañía y sus
trabajadores".
"La empresa tiene ámbitos en los que es posible trabajar con una
plantilla más ajustada y, además, dará oportunidad a que trabajadores que
llevan muchos años, algunos en trabajos con características muy exigentes como
maquinistas o empleados de talleres, puedan considerar atractivas las
condiciones del ERE y acogerse", detalló entonces.
Renfe aborda este ajuste de personal después de que a comienzo de año se
reestructurara en un hólding del que dependen cuatro nuevas empresas (Viajeros,
Mercancías, Talleres y Alquiler de Material). Según las previsiones también
expuestas por Gómez Pomar en el Congreso, todas estas sociedades, salvo la
nueva de alquiler, cerrarán este ejercicio en números rojos. De hecho, Renfe
Viajeros no alcanzará beneficios hasta 2016 ó 2017.Expansión.com