GREMIALES
El único plan
del gobierno para reestructurar AFE se basa en la creación de una sociedad
anónima y el pasaje de los funcionarios al derecho privado. Los sindicatos
trancan el proyecto hace un año y aseguran que habrá conflicto si se aplica.
"Los
trabajadores de AFE no vamos a pasar al derecho privado. Que el gobierno se
prepare para el conflicto", afirma Daniel Cajigas, secretario general de la Unión Ferroviaria ,
sindicato al que están afiliados más de 700 de los 1.100 trabajadores de la
empresa. "Vamos a dar la pelea, no queremos ese invento del
gobierno", sentencia por su parte Pedro Coitiño, secretario general del
Sindicato de Ferroviarios del Uruguay (SFU), surgido a partir de un quiebre en
el sindicato madre, con 70 afiliados y reconocido por el Ministerio de Trabajo
hace un mes.
Luego de que
el presidente José Mujica fijara como prioridad el resurgimiento del
ferrocarril encomendó al subsecretario de Transporte, Pablo Genta, y su asesor
personal, Pedro Buonomo, que diseñaran una reestructura de AFE. A fines de 2011
y por decreto se difundieron los planes y la novedad fue la creación entre AFE
y la Corporación
Nacional para el Desarrollo (CND) de una sociedad anónima
para operar el negocio del transporte de carga y la logística. A dicha empresa
deberían pasar los funcionarios de AFE para regirse por las normas laborales
del derecho privado. Cuando se conoció el proyecto el Partido Socialista manifestó
reparos y Mujica fue contundente: "El proyecto no es negociable",
dijo. Un año después el Ejecutivo no avanzó en la formación de la empresa y
enfrenta la resistencia de los funcionarios que advierten que de ninguna manera
aceptarán un cambio en sus condiciones laborales y amenazan con un conflicto de
proporciones.
El pasado
miércoles Mujica les advirtió: "Si quieren estar prendidos de la teta y
tener las prerrogativas del funcionario público para que no los toquen cuando
hay que hacer una cosa… entonces no… eso lo vamos a discutir. De ahora en
adelante el que sirve tiene que funcionar y el que no sirve páguesele el
despido y que vaya".
Fue el
Ministerio de Transporte el que comenzó a negociar con la Unión Ferroviaria
hace más de un año la reestructura. "En una de las primeras reuniones uno
de los negociadores, sin ninguna experiencia, nos invitó a pelear en la
esquina. Ahí rompimos relaciones con el Ministerio de Transporte y nunca más
hablamos con ellos. Nos llama la atención que Genta hable del tema, ni él ni el
directorio de AFE saben nada porque nunca más nos reunimos con ellos, nosotros
negociamos con Presidencia por orden del presidente Mujica", dijo Cajigas
a El País.
Los
negociadores de Mujica son el embajador itinerante Julio Baraibar y el subsecretario
de Trabajo, Nelson Loustanou. Cajigas puso un ejemplo: "Genta negó esta
semana que una delegación oficial viaje al País Vasco para ver el proyecto que
presentó la firma Euskotren, que es por lejos el más serio, y Baraibar nos dijo
hace unos días que la semana que viene decide si se viaja. Genta no sabe nada,
el que manda es Baraibar".
El
vicepresidente de AFE, Álvaro Fierro, dijo a El País el pasado domingo que la
formación de la empresa de derecho privado está encaminada y ya se hicieron los
llamados para contratar a cuatro gerentes.
"Ninguno
de los trabajadores de AFE va a pasar a la sociedad anónima. Nos quieren quitar
los derechos de trabajadores públicos y no lo aceptamos porque, además, no hay
ninguna causa que lo justifique. Lo venden como una reestructura y no es nada
de eso, es un cambio mínimo, no hay proyecto y no asegura que el ferrocarril
funcione mejor. Le echan la culpa a los trabajadores cuando el problema es de
administración, es de la gente que puso en el directorio este gobierno y todos
los anteriores. Lo del derecho privado es un castigo a los trabajadores, un
chivo expiatorio y no lo vamos a aceptar", afirmó Cajigas.
"Pueden
formar la empresa, aunque les va a costar. Tendrán que capacitar gente en el
exterior porque acá no hay una sola escuela que prepare técnicos o ingenieros
ferroviarios. Si los capacitan en tres años tienen un técnico y en siete un
ingeniero. Eso sí, van a paralizar los trenes todo ese tiempo", advirtió
Cajigas.
"Si
vamos al derecho privado dejamos de ser públicos, pasar a esa empresa implica
terminar con derechos que hemos ganado", señaló.
Según la Unión Ferroviaria
el sueldo de un oficial extra de AFE con 30 años de servicio ascienda a 12.786
pesos nominales, incluidos los aumentos de enero del 2013. "Esas son las
prebendas de las que habla Mujica", dijo Cajigas.
Pese a haber
cruzado la vereda y cuestionar a la Unión Ferroviaria
por su "postura afín al gobierno", el novel Sindicato de Ferroviarios
del Uruguay (SFU) -no está afiliado al Pit-Cnt- es igual de tajante.
"Tenemos trabajadores con treinta años de servicios y los quieren hacer
empezar de cero en una sociedad anónima. No es justo. Yo tengo 36 años en el
ferrocarril, soy maquinista, estoy por jubilarme y una empresa privada es
volver a cero. Además, no asegura que el ferrocarril sea mejor. El problema es
de los que gestionan y las decisiones que toman", afirma Coitiño.
"Como
sindicato la decisión es clara: que ni un solo trabajador pase a derecho
privado. Que se preparen para el conflicto", advirtió Coitiño.El País
Digital