EDITORIAL
Por: Carlos Alberto Salgado (Director CRÓNICA FERROVIARIA)
En estos días se han producido algunas noticias a nivel ferroviario, que traen un poco de esperanza para que se vaya recuperando, aunque no con la rapidez que uno pretende, este necesario e imprescindible medio de transporte que nuestro país necesita a la brevedad tenerlo como competidor firme de los demás.
No me cansaré nunca de repetir que dicha recuperación será positiva si su proyecto de recobrar, es tomado como política de Estado en serio. Hasta ahora el gobierno, después de haber pasado más de siete años de gestión, sólo en el discurso de algunos de sus funcionarios prometió llevar a cabo (la política de Estado), cosa que hasta el presente no se hizo. Ahora, hasta los acérrimos enemigos del ferrocarril salen graciosamente hablando de su recuperación. Un país de circo donde algunos trabajan de payasos.
Pero bueno, ante la infinidad de promesas incumplidas, algunas noticias positivas asomaron por el horizonte de esta pasada semana. Una de ellas es la aprobación de un préstamo por valor de 320 millones de dólares por parte de la Corporación Andina de Fomento (CAF), que fuera gestionado por el Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, para ser destinado a recuperar una partecita de la infraestructura de vía, señalamiento, comunicaciones y material rodante y tractivo perteneciente al Ferrocarril General Belgrano (SOE SA).
También, un consorcio multinacional, liderado por la firma argentina Corporación América (Casa), apunta a iniciar antes de fin del año en curso los estudios técnicos y geológicos para un túnel ferroviario que conecte Chile y Argentina, en una iniciativa privada con una inversión de 3.000 millones de dólares ,y que fuera declarada de interés público por las autoridades chilenas y argentinas el año pasado. Otros participantes en el proyecto incluyen a la firma japonesa Mitsubishi, la argentina Contreras Hnos, la italiana Geodata y la chilena Empresas Navieras.
Siguiendo con algunas buenas nuevas, el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (prometedor de obras de Subtes a razón de 10 km. por año) en estos días arranca con la construcción de 7 cruces bajo nivel de las vías pertenecientes a la Línea Urquiza y Mitre. También, en Capital Federal se llamó a licitación para realizar 3 en la Línea San Martín. Todo esto es muy bueno, ya que de una vez por todas se debía empezar a realizar obras de esta índole, para solucionar el acuciante problema que originan los pasos a nivel en el distrito metropolitano, por el aumento que año a año tiene el parque automotor y por la imprudencia de algunos que pone en peligro la vida de muchos otros.
A decir verdad, y para tratar de ser ecuánime, durante estos 7 últimos años en este rubro (bajo o alto nivel) se han construido varios, tanto en la Capital Federal como en el Gran Buenos Aires, en comparación con los últimos 60 años que prácticamente no se hizo absolutamente nada al respecto, que de haberse realizado sólo 10 PAN por año, hoy tendríamos solucionado parte del problema, tanto para el tráfico de autos, como de los servicios ferroviarios, ya que, por ejemplo, la Línea Sarmiento al no tener tantos cruces, tendría, ya sea por estar construidos los bajo o alto nivel, en su hora pico más trenes, no haciéndolo ahora porque las barreras, al ser automáticas, estarían constantemente bajas, lo que ocasionarían graves problemas en el tráfico automotor.
También, al ser la Línea con el más alto porcentaje de accidentes (atropello de personas, suicidios, etc.) dentro del radio de la Capital, no traería los inconvenientes que suceden hoy cuando ocurren estos hechos, que son casi a diario. Lo mismo es para las grandes ciudades del interior del país.
Asimismo, entre los hechos positivos podemos decir que la gente de Entre Ríos está contenta con la reapertura de algunos ramales que cruzan horizontalmente la provincia. Yo también lo estoy. ¡Cómo no estarlo!, si se está recuperando patrimonio y servicios para la gente. También lo estuve con las otras empresas provinciales cuando fueron las únicas que no renunciaron al tren. Pero todo sería muy bueno si viene acompañado con seriedad. Por qué digo esto, porque no me cierra lo de los llamados a licitación de 3 duplas de coches motores fabricados por la empresa Materfer por parte de la ADIF SE para la UEFER, ya que para principio del mes de Diciembre se le entregaría la segunda dupla cuando todavía la licitación hace unas horas que se llevó a cabo.
Sé, entiendo y comprendo, que todo no se puede hacer en el acto, porque los traidores que destruyeron al país, y sobre todo a los trenes, durante años hicieron lo imposible para hacerlo pedazos, y hoy tenemos que estar escuchándolos por los medios hablar de la vuelta de los trenes. Reconozco que su recuperación lleva tiempo, pero también digo, que las cosas no se pueden realizar dejando pasar años hermosos estudiando proyectos de fácil ejecución, que después se vean envueltos en una burocracia, que a veces, destila olor a podrido, prometiéndoles cosas a gente que se rompe el alma queriendo hacer correr trenes de pasajeros por sus localidades y provincias, y después abandonándolos a su suerte con promesas que casi nunca se realizan, a no ser que el gobernador o intendente sea "muy amigo" del poder o no lastime los intereses del sistema de transporte automotor.