El tren, de manufactura francesa y con una velocidad máxima de 220 kph (135 mph), reduce el tiempo de traslado entre ambas ciudades a tres horas y media. El trayecto de 415 kilómetros (250 millas) tomaba más de seis horas, incluyendo una parada en la frontera.
El primer ministro ruso Vladimir Putin, izquierda, y la presidenta finlandesa Tarja Halonen conversan en el tren Allegro, en la estación de Vyborg, Rusia, a 160 kilómetros (100 millas) al oeste de San Pertersburgo el domingo 12 de diciembre del 2010. Halonen y Putin inauguraron la primera vía férrea de alta velocidad entre la Unión Europea y Rusia.
Es el primer enlace ferroviario de alta velocidad entre Europa y Rusia, dijo Otto Lehtipuu, vocero de la compañía finlandesa de ferrocarriles VR.
Alrededor de 200 personas subieron al tren en Helsinki junto con la mandataria finlandesa. Los rusos, incluido Putin, subieron en la ciudad fronteriza de Vyborg para el último tramo del viaje inaugural.
"Estuvo genial. Fue muy rápido. Ni siquiera tuvimos suficiente tiempo para platicar", dijo Putin a reporteros cuando llegó a San Petersburgo.
El director de ferrocarriles de Rusia, Vladimir Yakunin, dijo que esperaba que los extranjeros que tomaran el tren hacia San Petersburgo pronto pudieran visitar la ciudad por hasta 72 horas sin necesitar visa, un privilegio que hoy sólo tienen los pasajeros de cruceros.
Las compañías ferroviarias esperan transportar 250.000 pasajeros en 2011, 25% más que este año, dijo Lehtipuu.
Los trenes, construidos por Alstom S.A., tendrán inicialmente dos corridas diarias desde Helsinki y San Petersburgo, y las incrementarán a cuatro al día para mayo. Fuentes y foto: Negocios AP