EXTERIOR
A diez y siete años de la “capitalización” de los ferrocarriles y la
perogrullada de los voceros del Estado Plurinacional, nos lleva a la conclusión
de que el Gobierno Central no tiene una agenda ferroviaria orientada a saber
qué se hace con los ferrocarriles “capitalizados”; ¿se recupera y se recompone;
o, se los deja desaparecer?.
La Red Andina con una longitud de 2.274 kms., el 70 por ciento está
destruida. El ramal Oruro-Cochabamba ha desaparecido. La Red Oriental con 1.423
kms., no tiene planes de modernidad y expansión de servicios, su explotación es
rutinaria, incumple los Contratos de Concesión y Licencia de la capitalización
elaborados por Chile sin la participación de profesionales bolivianos. En
resumen, la “capitalización” de ENFE a manos chilenas, resultó ser no solo un
fraude, infringió también un daño económico al país cercano a: Mil millones de
Dólares Americanos. El Gobierno Central, probablemente, admitiendo esta
realidad y para confundir a la opinión pública, ha dispuesto el diseño de un
tramo ferroviario entre las localidades de Bulo Bulo – Montero.
Este tramo ferroviario por no formar parte del Corredor Transcontinental
Central: Santos – Arica, no tiene fundamento ferroviario. Sus características
son: longitud, 148 kms.; trocha métrica (ancho de la vía un metro). Servicios,
carga y pasajeros. Velocidad, trenes de carga, 100 kms. a la hora, trenes de
pasajeros, 160 kms. a la hora. Costo en dólares americanos 250 millones. Este
tramo ferroviario estaría destinado a carga específica y tonelajes también
específicos. Para el transporte de personas no sabemos si se hizo un estudio
que justifique un ferrocarril en el sector.
Una observación: Si la trocha (ancho de la vía) es de un metro, un
convoy ferroviario de 25 vagones con un peso aproximado de 1.400 toneladas,
podrá desarrollar una velocidad de 100 kms/ hora, sin las contingencias
emergentes de semejante disparate técnico?; un tren de pasajeros con 12 vagones
– la misma pregunta -, podrá desarrollar 160 kms/ hora, sin exponer la vía de
los usuarios?.
Para que un ferrocarril como el analizado brevemente, desarrolle
velocidades de 100 y 160 kms/ hora, rieles, durmientes u otro sistema, tienen que
utilizar una plataforma a determinada altura del suelo. Esta estructura debe
estar diseñada en línea recta sin gradientes ni curvas; es más, locomotoras,
vagones, rieles y durmientes tienen que reunir diseño y condiciones técnicas
específicas.
Una referencia: la avanzada tecnología en países del primer mundo en la
evidencia que el 2070 de este Siglo XXI, se agotarán los combustibles fósiles,
ya existen ferrocarriles de alta velocidad al punto de que en España, Japón y
la China Continental, están en operación ferrocarriles a levitación magnética
sin ruedas, desarrollan velocidades de hasta 500 kms. a la hora. En Bolivia, no
sabemos ni nos interesa el papel que cumple un ferrocarril. Finalmente, el
Gobierno Central, poniendo en práctica su filosofía antiimperialista y
anticapitalista, debiera determinar y explicar al país, ¿Qué se hace con los
ferrocarriles “capitalizados”, tienen o no importancia para una Bolivia
enclaustrada y geográficamente paso forzoso entre el Atlántico y el Pacifico?.
Comparar costos de operación con otros medios de transporte masivo;
contaminación ambiental, seguridad y demás factores que colocan al ferrocarril
en un primer plano. El proyecto Bulo Bulo - Montero, por los señalados
problemas aún no esclarecidos y resueltos, es un verdadero
sarcasmo.Opinión.com.bo