Empresas
Talgo,
la compañía encargada de la fabricación de los trenes de la línea de alta
velocidad que unirá las ciudades saudíes de Medina y La Meca, está dispuesta a
ralentizar el ritmo de entregas si el cliente se lo pide. Aunque el derrumbe
del precio del petróleo llevó a Arabia Saudí a incurrir en un déficit de más de
90.000 millones el año pasado, su Gobierno no ha comunicado su intención de
detener o ralentizar los trabajos de la línea. No obstante, en la presentación
de resultados remitida hoy a la CNMV, Talgo afirma que “las recientes
dificultades registradas en los mercados de materias primas están impactando en
algunos de nuestros clientes.
Aún
así, podemos confirmar que el alcance global de los contratos no se verá
reducida aunque sí ajustaríamos el ritmo de fabricación de algunos contratos en
caso de ser requerido por el cliente”, concluye. En el apartado de previsiones
para este año, la compañía reitera que entre las principales objetivos de
fabricación está la “ejecución esperada de la cartera principalmente enfocada
en Arabia y Kazajistán” y la “adaptación del ritmo de fabricación de acuerdo con
las necesidades del cliente, en su caso”.
Para
Talgo, el contrato del conocido como “AVE de los peregrinos” es tan emblemático
como estratégico. La compañía cerró 2015 con una cartera de proyectos de 3.117
millones de euros. De ellos, el 76,1% está fuera de España, principalmente en
Arabia, como reconoce en la presentación. El pasado ejercicio, la compañía
envió dos trenes al país adicionales al que ya mandó en 2014 y realizó las
primeras pruebas dinámicas de forma “satisfactoria”.
Talgo
forma parte del consorcio español Al Shoula que ganó el contrato para la
ejecución de la segunda fase del proyecto de AVE La Meca-Medina por 6.700
millones de euros. Las compañías se encargan de la construcción de la
superestructura, la señalización, el material rodante y la explotación. Talgo
es la encargada de suministrar los trenes.
La
compañía logró el pasado ejercicio un beneficio neto de 60 millones de euros,
un 55% superior al de 2014. Sus ingresos se incrementaron un 36%, hasta
alcanzar los 521 millones de euros, impulsados tanto por la fabricación como
por los servicios de mantenimiento recurrentes. Para este año, la firma ha
identificado oportunidades de negocio a nivel global por importe de entre 9.200
y 12.900 millones de euros, fundamentalmente en Europa -entre 4.000 y 5.600
millones de euros-.LaRazón.com.es