Actualidad
Redacción Crónica Ferroviaria
Desde Crónica Ferroviaria en distintas notas que publicamos en nuestro medio, ya informábamos sobre la inseguridad que se vive en la traza ferroviaria donde barrios que se encuentran pegados a la misma se viven hechos de inseguridad, tanto por el robo de durmientes y otros elementos, como el apedreo constante de las formaciones que circulan por dichos ramales.
Hoy tenemos que informar que el tren de carga Nro. 5005 (con 25 vagones vacíos) que tiene como destino Salta, se encuentra desde hace tres días estacionado en Tafí Viejo porque rompieron el parabrisas de la locomotora GM modelo GT22CU Nro. 9739 de un piedrazo.
Según nos informa gente que trabaja en el ferrocarril en la zona, la cosa se va agravando día a día, a tal punto que la locomotora GM modelo G22CU Nro. 7778 que venía en auxilio de la 9739, no lo pudo hacer por el robo de durmientes en una alcantarilla ubicada en el triángulo de San Felipe. Por lo tanto, dicho tren todavía se encuentra en estación Tafí Viejo a la espera del auxilio correspondiente para seguir viaje hacia el Norte.
Lo que nos dicen, es que los barrios que están ubicados al Norte de la ciudad de Tucumán, como Muñecas, El Chivero y La Bombilla, cuyas casas se encuentran a orillas de la infraestructura de vía, es constante la inseguridad que se vive, tanto por el robo de material ferroviario, como por el apedreo de todo tipo que sufren los trenes de carga que circulan por la zona.
También en cercanías de Pozo de Vargas (Km. 804,000) del Ramal C, es constante el robo de durmientes de quebracho, que hizo que en una oportunidad una formación descarrilara, por lo tanto la empresa tuvo que cambiar dichos durmientes de madera por los de cemento.
Acá, creemos que lo que está fallando es la seguridad que tienen que brindar las autoridades nacionales y provinciales para que puedan circular sin dificultades las formaciones, y ver la posibilidad de poder sacar de la zona de los terrenos ferroviarios a las viviendas que se encuentran invadiéndolos, llevando a las familias hacia terrenos fiscales, no sólo para que puedan vivir en mejor forma, sino también por seguridad de ellos mismos, ya que hemos informado de descarrilamientos donde vagones de carga se han metido prácticamente dentro de las viviendas.
Creemos que hay que tomar pronta una resolución, y no buscar la fácil que es que el ferrocarril no funcione.
Redacción Crónica Ferroviaria
Desde Crónica Ferroviaria en distintas notas que publicamos en nuestro medio, ya informábamos sobre la inseguridad que se vive en la traza ferroviaria donde barrios que se encuentran pegados a la misma se viven hechos de inseguridad, tanto por el robo de durmientes y otros elementos, como el apedreo constante de las formaciones que circulan por dichos ramales.
Hoy tenemos que informar que el tren de carga Nro. 5005 (con 25 vagones vacíos) que tiene como destino Salta, se encuentra desde hace tres días estacionado en Tafí Viejo porque rompieron el parabrisas de la locomotora GM modelo GT22CU Nro. 9739 de un piedrazo.
Según nos informa gente que trabaja en el ferrocarril en la zona, la cosa se va agravando día a día, a tal punto que la locomotora GM modelo G22CU Nro. 7778 que venía en auxilio de la 9739, no lo pudo hacer por el robo de durmientes en una alcantarilla ubicada en el triángulo de San Felipe. Por lo tanto, dicho tren todavía se encuentra en estación Tafí Viejo a la espera del auxilio correspondiente para seguir viaje hacia el Norte.
Lo que nos dicen, es que los barrios que están ubicados al Norte de la ciudad de Tucumán, como Muñecas, El Chivero y La Bombilla, cuyas casas se encuentran a orillas de la infraestructura de vía, es constante la inseguridad que se vive, tanto por el robo de material ferroviario, como por el apedreo de todo tipo que sufren los trenes de carga que circulan por la zona.
También en cercanías de Pozo de Vargas (Km. 804,000) del Ramal C, es constante el robo de durmientes de quebracho, que hizo que en una oportunidad una formación descarrilara, por lo tanto la empresa tuvo que cambiar dichos durmientes de madera por los de cemento.
Acá, creemos que lo que está fallando es la seguridad que tienen que brindar las autoridades nacionales y provinciales para que puedan circular sin dificultades las formaciones, y ver la posibilidad de poder sacar de la zona de los terrenos ferroviarios a las viviendas que se encuentran invadiéndolos, llevando a las familias hacia terrenos fiscales, no sólo para que puedan vivir en mejor forma, sino también por seguridad de ellos mismos, ya que hemos informado de descarrilamientos donde vagones de carga se han metido prácticamente dentro de las viviendas.
Creemos que hay que tomar pronta una resolución, y no buscar la fácil que es que el ferrocarril no funcione.
Esperemos volver a tener en un futuro a un estado dirigista e intervencionista cono tuvimos desde las décadas de los 30 hasta los 70. No solo como ocurre ahora sacarle dinero a los contribuyentes. Sino hacer cumplir la ley y el orden
ResponderEliminarAntes de emprender planes de renovación de vías, hay que eliminar por completo las viviendas precarias y usurpaciones en terrenos ferroviarios. Estos señores de los ranchos construidos en zona de vía, tienen escritura??? Hay que meter topadora, esta gente no es dueña del ferrocarril. Sr. Enrique
ResponderEliminarpongan francotirados en los vagones y tiro en la cabeza a cada uno que tire piedras o quiera robar el tren.tal cual lo hacian en el far west.
ResponderEliminarEstimado: cuando Ud. analice que ocurrió con el transporte ferroviario en ese lapso de tiempo, encontrará que el transporte de cargas por FC creció hasta aprox. 1948, hasta llegar al orden las 48 millones de toneladas transportadas.
ResponderEliminarA partir de ese año (despues que el estado se hizo cargo de las concesiones FC privadas), las cargas transportadas disminuyeron progresivamente hasta el orden de las 22 millones de toneladas en 1970. Mientras tanto, la economía argentina creció durante ese tiempo, y con ella también las cargas transportadas. O sea, la cantidad de cargas transportadas por FFCC tuvieron una tendencia inversas a la economía argentina en su conjunto.
Entonces, es lícito hacerse una pregunta: ¿qué pasó durante esos años de estado dirigista e intervencionista, que mientras la economía argentina en su conjunto creció, el transporte ferroviario se achicó?
Una respuesta: la intervención al 100% del estado en el transporte ferroviario fue perniciosa, aunque las inversiones, especialmente en personal y material rodante fueron importantes.
Después de la reestructuración FFCC a principios de los 90, las cargas volvieron a crecer, hasta aprox. 28 millones de toneladas en el 2007. Luego, con políticas erráticas, se volvieron a estancar.
Sugiero leer: http://www.vocesenelfenix.com/content/el-transporte-terrestre-de-cargas-el-caso-del-ferrocarril
Es una nota escrita por un ex-presidente de FA.
Ernesto