EXTERIOR
La discusión, en el seno del gobierno, sobre el artículo 188 del
Proyecto de Rendición de Cuentas y Balance de Ejecución Presupuestal, demuestra
la amplitud de las diferencias de opinión entre el Ministerio de Transporte y
Obras Públicas y la
Administración de Ferrocarriles del Estado.
El sitio web del MTOP informa que existe la convicción de que es
necesario "contar con el modo ferroviario para el transporte de cargas,
por los crecientes volúmenes de cargas 'aptas' para el ferrocarril, la
disminución de los costos y externalidades positivas que le dan mayor
competitividad y sustentabilidad a diferentes emprendimientos productivos y
otros beneficios para la sociedad (combustible, accidentes, mantenimiento
vial)". Muy cierto, pero, como vemos, del dicho al hecho hay mucho trecho.
El gobierno optó por la estrategia de dividir la gestión del ferrocarril
en tres sectores: primero, los aspectos inherentes a la regulación del modo de
transporte; segundo, la administración de la infraestructura ferroviaria (vías,
puentes, señales) que necesitan de recursos públicos porque los ingresos
generados por los fletes no alcanzarán para cubrir esos costos; y, finalmente,
la prestación de servicios de transporte ferroviario que, considera el MTOP, "para
cargas puede y debe ser rentable".
Como resultado, en el limitado plato del transporte ferroviario deberán
convivir varios pares de manos: las de la Dirección Nacional
de Transporte Ferroviario (MTOP); las de AFE; las de la empresa ferroviaria de
transporte de cargas; y las de otros operadores logísticos. La Dirección Nacional
tiene la responsabilidad de regular el sistema ferroviario; la tradicional AFE
se hace cargo de la construcción, mantenimiento de la infraestructura y del
servicio de pasajeros; la empresa (uno de esos híbridos público-privados tan de
moda) se dedicará al transporte ferroviario de carga y servicios logísticos
asociados.
El artículo 188 que el MTOP incluyó en la Rendición de Cuentas
dice que la empresa podrá "intervenir en la rehabilitación de la
infraestructura ferroviaria, adquirir material rodante y realizar transporte de
pasajeros en el Área Metropolitana de Montevideo".
Es interesante que el MTOP no haya consultado a AFE sobre el proyectado
artículo, a pesar de que parecería abrir la puerta para transferirle a la
empresa funciones que le corresponden a AFE (por ejemplo, permitiría que
aquella se encargase de obras y de transportar pasajeros nada menos que en el
Área Metropolitana).
En el Parlamento el Presidente del Directorio de AFE aportó un dato que,
admitió el Ministro, no habría sido manejado por el MTOP: la mayoría de los
servicios de transporte de pasajeros son deficitarios y necesitan de subsidios
estatales para operar. Como resultado, el artículo 188 dejaría abierta la
posibilidad de que el Estado termine pagándole un subsidio a una empresa que
funciona en el régimen de derecho privado. Algo que no sería aceptable para el
gobierno (Búsqueda, 25 de julio).ElPais
En síntesis: adiós a los servicios de pasajeros; lo hirieron de muerte con el cierre de la Estación Artigas en el 2003 y ahora le dan el tiro de gracia.
ResponderEliminar