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Redacción Crónica Ferroviaria
El Ministerio de Transporte de la Nación informa que el histórico edificio de la estación Retiro de la Línea Mitre está siendo restaurado para recuperar su brillo original. Las obras alcanzaron el hall y los andenes. Ahora también se suma el subsuelo que guarda una historia subterránea en más de 5 mil metros cuadrados.
En sus inicios, hacia 1915, en este espacio funcionaba una cocina que abastecía al restaurante y a la confitería. Además, por allí se trasladaban los equipajes y bagajes hacia el furgón de los trenes. Con los años entró en desuso y se convirtió en un depósito de basura y cables eléctricos que impedían el acceso.
Gracias a la puesta en valor, se recuperó este espacio con el objetivo de implementar sistemas de administración inteligente del edificio de última generación. De esta manera, se busca brindar una mayor seguridad a los 60 mil pasajeros diarios que transitan por Retiro y a 565 trabajadores.
El subsuelo cuenta con depósitos y bauleras operativas y comerciales, además de salas destinadas a sistemas inteligentes. Entre ellos, se destaca el de gestión de edificios que permite que la estación esté automatizada integralmente y mediante un software pueda manejarse de manera remota desde una Tablet o PC.
De esta manera, ante cualquier inconveniente, puede encontrarse qué parte del edificio presenta algún problema y decidir cuál es la solución más efectiva y rápida, además de tener un mejor control del plan de mantenimiento.
En otra de las salas se ubica el sistema de alimentación ininterrumpida que funciona como una reserva de energía eléctrica ante algún apagón o desperfecto. Así se evita que las principales dependencias y sistemas de la estación (centro de datos, sala de recursos informáticos y electrónicos, boleterías y Centro de Atención al Pasajero, entre otras) tengan cortes abruptos de electricidad, ya que este sistema se activa antes que los grupos electrógenos.
Además, en el subsuelo se ubica el tablero general de baja tensión (TGBT) desde donde se maneja la electricidad de toda la estación. Cuenta con sensores, monitoreo de consumo y temperaturas. Además, permite equilibrar la tensión eléctrica y tiene una conexión con cuatro grupos electrógenos de 300 kilowatts cada uno para brindar electricidad ante cualquier corte.
Por su parte, la sala contra incendios se conecta con bombas de agua que tienen capacidad para alimentar a toda la estación Mitre –hall, locales comerciales, subsuelo y las oficinas de la gerencia comercial– ante cualquier principio de incendio. El tanque que las abastece tiene una capacidad de cerca de 170 mil litros. Además, se incluyeron nuevos sistemas de extinción y detección de incendios que cumplen con normativas internacionales.
A su vez, hay una sala de tanques de agua con uno de 40 mil litros de agua potable para el uso de lavatorios, duchas y locales comerciales y otro de aguas grises con una capacidad de 70 mil litros de agua de lluvia recolectada para los inodoros de los baños públicos de la estación. También cuenta con bombas presurizadoras conectadas a un sistema inteligente que ante un corte de energía permite que sigan en funcionamiento.
Por último, desde la sala de recursos informáticos y electrónicos desde donde se manejan, entre otros, los sistemas de comunicaciones, de aire acondicionado y de alimentación ininterrumpida. Esta sala tiene un sistema de extinción de incendio específico con gas fm200, que no es conductor de electricidad y, a la vez, es inodoro e incoloro, por lo cual es efectivo para la protección de riesgos eléctricos y para usar en salas de ordenadores.
El subsuelo también incluye un “pasillo seguro”: se trata de una construcción de 98 metros, que es obligatoria cuando el punto más lejano a una salida de emergencia está a más de 15 metros de distancia. Es “seguro” porque no tiene ninguna instalación, componentes inflamables y cañerías, sino que presenta un techo losa de hormigón a la vista y los cables de las instalaciones van por encima de él. Además, tiene una inyección de aire para impedir el ingreso de humo a dicho sector, por lo que la evacuación es segura.
En cuanto a las instalaciones para los trabajadores, se ofrecen nuevos puestos de trabajo para el área de material rodante y para los auxiliares que despachan los trenes, con monitores LED en el que se visualizan los andenes. Los empleados disponen de nuevos vestuarios y baños amplios y modernos con 500 lockers, duchas y bachas. Además, tienen una sala de descanso y comedor con 180 plazas. Allí cuentan con sillones, mesas, sillas, televisores de 42” full HD y 12 microondas y dispensers de agua fría y caliente conectados a la red de agua potable. Por último, se incluyó una sala de capacitación y una cocina con 4 hornos eléctricos, 12 heladeras de 380 litros, 4 anafes eléctricos y 8 bachas.
