De seguir así, el tren urbano a General Güemes va a perder el tren de la historia. Y la historia no nos va a perdonar habernos quedado también sin ese tren.
Estación SALTA
Aunque todos sabemos que muchas veces los anuncios oficiales suelen ser eso, anuncios oficiales, aquel 18 de junio de 2009 Salta tuvo muchas ganas de confiar en la palabra de la presidenta Cristina Fernández. Esta vez parecía que sí. Llegó la locomotora y sobre ella, sonrientes, se fotografiaron funcionarios provinciales y municipales. Inclusive, la feliz comitiva recorrió tramos breves dentro del ejido urbano.
Más de dos años pasaron, más de dos elecciones en el medio y ahora, a las puertas de otra, la corrida del tren urbano todavía es un enunciado.
Todos creímos que era en serio cuando el 27 de julio pasado se dijo que “la semana que viene correrá el tren a Güemes”. Los eventuales usuarios prepararon las monedas (dicen que costaría $5), hicieron planes y, sobre todo, abonaron las ilusiones. Pero no. Llegó “la semana que viene” y supimos que “el tren a Güemes está listo pero le falta un permiso”. ¿No suena a broma (de mal gusto)? Para colmo, ayer trascendió que hace pruebas sin pasajeros. ¿Hasta cuándo? No se sabe.
¿O será como aquel anuncio de los '90 según el cual una nave nos llevaría a Japón pasando por la estratósfera? La verdad, todos esperamos que lo del tren a General Güemes no sea un delirio.(Fuente y foto: ElTribuno.com.ar)
Es una pena que se juegue de ésta manera con la sana expectativa de la gente que es la beneficiaria de éste servicio anunciado pero no puesto en práctica. En Tucumán pasa algo similar ¿ es una fatal coincidencia ? lo ignoro pero de algo estoy seguro: no se puede jugar con la gente y menos aun con sus necesidades.Argentinos: a las cosas de una buena vez por todas.
ResponderEliminarATTE. Dr. HUBER
Hay que tomarlo como de quien viene, "El Tribuno"
ResponderEliminarLo único inconcebible es que el funcionario responsable del ferrocarril siga en su puesto en el gobierno luego de haber perjudicado tanto, no solo al ferrocarril y al pueblo, sino también a su propio gobierno al convertirlo en mentiroso. El responsable de la mentira es un funcionario y ese funcionario no debería estar donde está. Hay otras personas, mucho más capaces, honestas, expertas, bien intencionadas y con clara identificación con la presidenta. ¿Por qué sigue en su puesto alguien que no trabaja para el gobierno de la presidenta y en cambio desde su puesto trabaja para cierto opositor, que mejor no nombrar?
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